La Ley orgánica de Aduanas de Bolivia hoy cumple 10 años, luego que estuvo vigente durante 70 años, fue sustituida mediante Decreto Supremo, sin embargo el comercio exterior ha hecho que esta ley haya sufrido algunos cambios y derogaciones por la vigencia de la nuevo Código Tributario.
Según expertos coinciden que esta ley ha permitido un impacto positivo en las recaudaciones por renta aduanera entre otros elementos, sin embargo no es suficiente porque el contrabando ha logrado perforar la economía del país especialmente a las arcas del Estado y de las empresas legalmente establecidas.
Para Gary Rodríguez, gerente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), manifestó que esta nueva ley ha permitido con la institucionalización en la aduana que costó varios millones de dólares al país y que de alguna forma ha ido a mejorar la imagen de Santa Cruz desde el punto de vista del interés y de resguardar la competencia legal y leal en el mercado interno para no desfavorecer a la producción nacional, pero también desde el punto de vista de las recaudaciones de impuestos y gravámenes de importación para alimentar al erario nacional.
Durante mucho tiempo fue considera como botín político como atributo de los gobiernos neoliberales, además de otros aparatos públicos que esto va en contra del mejor ejercicio de la función aduanera y por supuesto los afectados por doble partida son los productores nacionales y también los ingresos del estado, se da esto por la propia situación política que vive el país.
«Un ejemplo claro de esto es el caso del ingreso de la ropa usada, por mas que la aduana quiera luchar contra el contrabando existe la permisividad en los mercados internos de seguir vendiendo pese a la prohibición, no cuenta con un recurso humano ni económico para hacer frente a ese monstruo de mil cabezas con el contrabando que además es el primo hermano del narcotráfico», recalcó.
Por su lado Pablo Mier presidente de la Cámara de Despachantes de Aduana, indicó que esta ley ha permitido incrementar las recaudaciones en renta aduanera para el país y que ha permitido modernizar el trabajo al interior de la Aduana Nacional y armonizar el trabajo entre los operadores de comercio exterior de manera coordinada con sectores públicos y privados en busca de los intereses del Estado y de la sociedad.
Sin embargo considera que la capacitación es indispensable puesto que eso permitiría un control mas efectivo para luchar contra el contrabando, pero además del fortalecimiento de las fronteras. «La comunidad andina esta generando un proceso de armonización, lo que podría ser un nuevo código aduanero, que se parece a la que tenemos, para facilitar las acciones de operación aduanera en comercio exterior, que puede beneficiar a todo el bloque andino a facilitar y garantizar la seguridad jurídica y el marco legal contando con procedimientos ágiles y breves», puntualizó Mier.
Fuente: El Mundo – Estela Leytón