Más de 250 representantes de empresas e instituciones del Mercosur participaron del encuentro que tuvo por objetivo analizar el rol de las agencias aduaneras de la región en la protección de los derechos de propiedad intelectual. Asimismo, se abordó la importancia del diálogo público-privado; las mejores prácticas en modernización de aduanas en la región; el gerenciamiento del riesgo y la valoración aduanera. En uno de los principales paneles, los directores de las aduanas de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay disertaron acerca de cómo mejorar las prácticas en la modernización de las aduanas del Mercosur.
María Luisa Carbonell, Directora de Asuntos Internacionales de la AFIP, manifestó que todas las aduanas del Mercosur se encuentran hoy transitando un proceso de modernización para establecer un sistema informático de tránsito internacional aduanero (SINTIA). «El SINTIA comenzó a trabajarse en 2008 y busca informatizar en el ámbito del Mercosur los procesos establecidos en el Acuerdo de Alcance Parcial sobre Transporte Internacional Terrestre. Con esto se busca la armonización del despacho, la obtención de padrones únicos de transportistas habilitados, bajar los costos operativos y lograr mayor celeridad en la tramitación de la operación», explicó Carbonell. De esta forma, se le permitirá a las aduanas contar con información previa sobre los tránsitos antes del arribo del medio transportador, a la vez que optimizar la utilización de los recursos disponibles para una ejecución eficiente de los controles.
Además, agregó que ya se encuentra aprobado un esquema funcional para el Mercosur, las estructuras de datos y de documentos y mensajes. En este marco, Argentina y Paraguay han iniciado en 2009 la implementación del sistema de prueba piloto, mientras que Brasil y Uruguay están efectuando sus adaptaciones al sistema con la idea de iniciar la prueba piloto en 2011.
Por su parte, Herica Gomez Vieira, Coordinadora de Fiscalización y Control Aduanero de Brasil, abordó la dinámica del modelo de control de la aduana brasileña, basado en la integración entre tecnología, información e inteligencia. También, analizó el Sistema de Información Anticipada (SISCOMEX), que incluye la informatización de la información y gerenciamiento del riesgo. «Actualmente el modulo marítimo se encuentra en funcionamiento desde el año 2008 y se está trabajando con la idea de finalizar en 2011 el modulo terrestre y aéreo», afirmó Gomez Vieira.
Miguel Acosta, Director de Aduanas de Paraguay, presentó la última herramienta de modernización incorporada por el país: el sistema de ventanilla única del importador. Acosta explicó que este sistema, vigente a partir de enero de 2011, forma parte de un proceso de modernización iniciado por la aduana en 2003 y que contó con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). El proceso implicó también la publicación del nuevo código aduanero del Paraguay en el 2006 y la implementación de normas de calidad. Acosta agregó: «Paraguay Importa, a través de su programa de ventanilla única, facilita la presentación de documentación estandarizada a través de un solo punto de entrada. Hoy los cargos por importaciones presentan el 60% de los ingresos de la aduana de Paraguay».
Finalmente, Enrique Canon, Director de la Dirección de Aduanas de Uruguay, presentó sus proyectos estratégicos, entre los que se destacan la iniciativa de descentralización de pagos, el pre expediente electrónico y la incorporación del precinto electrónico. Con respecto al sistema de ventanilla única, Canon expresó que más de 30 organismos de comercio exterior están involucrados en este proyecto.
«Hoy hay 80 tipos de certificados que en su mayoría se tramitan en forma manual y que presentan un desafío para la administración y el sistema. El proyecto incluye una propuesta de rediseño de los procesos, gestionar el financiamiento, definir el marco normativo de la ventanilla única, y adquirir la tecnología necesaria para poner en funcionamiento los primeros procesos de tramite en 2012», manifestó Canon. En este sentido, anunció que están trabajando en una reestructuración de la gobernanza de la aduana, y diversas medidas tales como la creación de un documento único aduanero, incentivos por desempeño, certificación de procedimientos de fiscalización, un código de ética y un estatuto del funcionario aduanero.
