Los responsables del departamento de Costos de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC) desplegaron las variables que componen el índice que se elabora mensualmente, ante una mesa compuesta por representantes de la industria alimenticia nucleados, en Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (Copal).
Por la iniciativa conjunta de las entidades empresarias, se realizó una charla sobre la estructura de costos del transporte, con el objetivo de buscar mecanismos que optimicen los costos de los distintos actores, ambos partícipes de la cadena agroindustrial.
Al comenzar la jornada, el titular de FADEEAC, Daniel Indart, ofreció un panorama sobre la actualidad del sector, marcando que «el índice mensual que elaboramos se diagrama con valores de insumos que no fijamos nosotros, por eso, lo que podemos discutir es mayor o menor rentabilidad».
«Siempre sentimos que para el dador de carga, cuando tiene que achicar sus costos, el flete es la variable de ajuste», explicó Indart y agregó que «necesitamos cambiar esta concepción porque somos parte de la cadena de producción, del comercio internacional y de la cadena de abastecimiento».
Además, afirmó que el sector está atravesando «un problema muy difícil de rentabilidad, pero seguimos buscando alternativas para mejorar la competitividad». Luego, Lucio Cassani y Emilio Felcman, representantes del área de Asuntos Tributarios y Costos de la Federación, desglosaron los puntos que analizan para elaborar el índice mensual.
«El transporte puede ser caro o no, todo depende con qué se lo compare, pero lo importante es que tiene un costo por kilómetro recorrido, entonces, no es lo mismo llevar lácteos, soja o papel, ya que cada producto tienensu propio valor», expuso Cassani.
«En algunos casos -continuó- el costo del transporte puede alcanzar el 60 por ciento del valor del producto y en otros puede ser mucho menor; lo mismo pasa si se tiene en cuenta la distancia y la cantidad que se transporta del mismo producto».
Desde Copal se planteó la pérdida de rentabilidad que están demostrando las economías regionales y mostraron preocupación por los precios del flete. En este sentido, desde Fadeeac se apuntó a revisar puntualmente las variables de cada industria y trabajar de manera conjunta para optimizar los costos, apuntando básicamente a la organización y diagramación de los viajes, donde un transporte eficiente debe conjugarse con un servicio de logística.
Pero, a la vez, remarcó que la mayoría de las empresas de transporte son pymes (de 1 a 5 camiones), que no cuentan con una estructura y, muchas veces, trabajan por debajo de los costos reales sin medir las consecuencias que generan en el sector: competencia desleal, desvalorización de la tarifa, pérdida de rentabilidad, inseguridad vial, etc.
El asesor de FADEEAC, Leopoldo Arismendi, celebró la realización del primer encuentro entre el sector transportista y los industriales de la alimentación y explicó que «desde Fadeeac se intenta visibilizar la transparencia de los Costos del transporte para que se valore la tarifa, trabajamos para que el transportista no caiga en la marginalidad y arrastre al sector con la depreciación de su trabajo».
Para finalizar, Oscar Farinelli, reflejó la actualidad en materia de Seguridad y sostuvo que el delito de piratería del asfalto no ha crecido en los últimos años. Marcó que «el pico de inseguridad para el transporte se dio en 2003, a partir de ahí, desde Fadeeac comenzamos a trabajar de manera criteriosa con la seguridad privada y las policías en conjunto».
«Logramos -agregó- la creación de Fiscalías Temáticas, que atacan la raíz del problema y esto se traduce en investigaciones concretas que neutralizan bandas». Además Farinelli opinó que «hoy no cualquiera puede ser pirata del asfalto, se necesita mucho equipamiento y tecnología; por eso, lo que se ve son hechos planificados que se realizan con trabajo de inteligencia en unidades que transitan con alto valor».
