La constructora empezará los trabajos alrededor del 20 de agosto sobre el acto de replanteo, primer paso para la concreción de esta obra emblemática para los riojanos que comprenderá el tramo que une Santo Domingo con Mulas Muertas y que prevé una inversión de 500 millones de pesos. El contrato fue suscripto por el administrador Miguel Bertolino y el representante de Roggio Vialmar, José María Urrutia.
«Esta parte de la obra comprende la última parte del camino, se trata de la apertura de la quebrada que es la única parte con ripio, desde allí el camino irá por Santo Domingo hasta Mulas Muertas. También se colocará una carpeta de rodamientos en el tramo de Barrancas Blancas hasta Pircas Negras», explicó el administrador de Vialidad. Detalló que esta parte de la obra incluye la obra básica completa, que comprende tareas de movimiento de más de dos millones de metros cúbicos de suelo y roca para llegar a completar el camino completo que hace a la Quebrada de Santo Domingo.
Por otra parte, se están retomando los trabajos en la Cuesta de la Troya, ese camino tiene un desvío de ocho kilómetros que forma parte de la Obra N°4 y está previsto terminarla a finales de este año. Esta etapa del camino a Chile conlleva una inversión de 500 millones de pesos y se comenzará a trabajar en unos quince días sobre el acta de replanteo, lo que significa el primer paso para llegar a los trabajos concretos de obra. El plazo de obra es de 38 meses y en los próximos días ya se podrá observar un importante movimiento de maquinarias y equipamiento hacia la zona de la obra por parte de la empresa Roggio Vialmar
Fuente: El Independiente, La Rioja
