Las distribuidoras Disprofarma, Globalfarm y Farmanet junto a los operadores logísticos Andreani y TRF y las droguerías del Sud, Monroe Americana, Cofaloza, Acofar y Suizo Argentina, participan de la primera etapa del proyecto de “Entrega Certificada”. La propuesta busca eliminar actividades que no agregan valor a los diferentes eslabones de la cadena de entrega de productos farmacéuticos y así optimizar todo el ciclo integral.
En la operación GS1 Argentina implementa el soporte en la definición de los estándares y Di Capua & Ochner, el asesoramiento en los procesos de Supply Chain desde el inicio del proyecto que comenzó hace tres años, asumiendo el rol de Project Management. La iniciativa sumará más proveedores y clientes al proceso, y avanzará con la implementación en droguerías integrales del interior del país.
Cronología
Hace tres años, el proyecto resultaba un gran desafío porque los indicadores de calidad de los proveedores, en general, se encontraban lejos del nivel mínimo aceptable para las droguerías integrales. Sin embargo, los beneficios que se esperaban generaban altas expectativas entre los involucrados.
Implementación
El funcionamiento comenzó mediante un “acuerdo operativo’’, en el cual se describieron los procesos que comenzaban con la preparación, control, embalaje y despacho de los pedidos en los centros de distribución de las distribuidoras, y continuó luego con las actividades de recepción, control y almacenamiento en las instalaciones de las droguerías Integrales.
El criterio desarrollado para resolver controversias fue el enfoque integral-extendido de la para optimizar el proceso sin importar quién se pudiera ver perjudicado o beneficiado sino siempre con la intención de “optimizar el todo en lugar de alguna de las partes”.
Con ese enfoque, la mercadería tiene que fluir dejando de lado controles repetitivos y manipuleos innecesarios, y garantizando un tiempo óptimo en el ciclo “preparación del pedido en la distribuidora– disponibilidad de la mercadería en stock para la venta en la droguería” con el menor costo posible.
Así, el proceso puso en la misma mesa a todos los actores, buscando comprender las necesidades de unos y las limitaciones de otros, de modo que lo que comenzó como una relación de clientes y proveedores poco a poco se fue constituyendo en una relación de confianza que hoy los sitúa como socios estratégicos.
Primera etapa
El inicio apuntó a poner el proyecto en servicio dentro del ámbito de las droguerías del AMBA, y hoy con esa etapa prácticamente finalizada, los actores ya experimentaron beneficios como: reducción del ciclo del pedido (tiempo desde que se hace el pedido hasta que la mercadería está disponible para la venta) y del número de verificaciones de control, baja en el tiempo de estadía de la mercadería en la recepción de las Droguerías Integrales, mejoramiento en la calidad de las entregas, identificación y procesamiento prioritario de productos críticos en la recepción de las droguerías Integrales, reducción en los tiempos administrativos y de manipulación de la mercadería, y baja del tiempo de permanencia del proveedor durante el proceso de recepción, descarga y control de la mercadería.
Asimismo, permitió contar con información en formato electrónico, anticipada y estandarizada; con trazabilidad alineada con los requerimientos de ANMAT e integración y mayor visibilidad de la cadena de suministro.