Representantes de una misión del Gobierno y de empresas alemanas firmaron, el pasado 16 de enero, con autoridades de Bolivia tres convenios para estudiar el proyecto de un ferrocarril bioceánico y el desarrollo de la energía eólica e infraestructura de transporte.
El viceministro alemán de Transporte, Rainer Bomba, y los representantes de dos empresas suscribieron los acuerdos con ministros bolivianos en el Palacio de Gobierno de La Paz, en un acto al que asistió el presidente boliviano, Evo Morales.
El gobernante dijo que se trata de acuerdos generales que serán una base para que los técnicos de ambos países trabajen en los proyectos, tras las decisión política tomada por ambos Gobiernos.
El ministro de Obras Públicas, Milton Claros, y el presidente de la empresa alemana-suiza Molinari, Michel Molinari, firmaron un convenio para avanzar en el estudio de un tren bioceánico que comience en el puerto brasileño de Santos, atraviese territorio de Bolivia y concluya en las terminales peruanas de Ilo o Matarani.
Morales destacó que Perú, que tiene proyecto ferroviario propio para unirse directamente a Brasil, también aceptó hacer un estudio preliminar que incluya a Bolivia en el diseño del ferrocarril.
«Este día realmente puede marcar una gran integración intercontinental como también de carácter suramericano», sostuvo.
Bomba destacó que la conexión ferroviaria entre los océanos Atlántico y Pacífico sería una gran obra «del siglo», que le traerá beneficio en las condiciones de vida a mucha población, mejorará el transporte de carga y el comercio internacional.
Molinari ya se ha adjudicado la instalación de un tren urbano eléctrico en la ciudad de Santa Cruz y localidades aledañas de Montero y Warnes, situadas en esa región del este del país.
El ministro de Hidrocarburos y Energía, Luis Alberto Sánchez, firmó con la empresa alemana Enercom, representada por Carla Tapia, un acuerdo para impulsar la energía eólica, que en Bolivia tiene un escaso desarrollo.
Claros y Bomba firmaron además un convenio para el desarrollo de la infraestructura y sistemas de transporte.
Durante su estadía, el viceministro alemán de Transportes también visitó el salar de Uyuni (sureste), para explorar la posibilidad de que las empresas alemanas puedan conocer los proyectos bolivianos para la industrialización del litio, material que se usa para fabricar baterías destinadas a la industria de automóviles eléctricos.
Bomba aseguró que las empresas de su país quieren «transferir conocimiento, experiencia y capacidad tecnológica» a Bolivia para que sean los propios bolivianos los que construyan las obras.
«Nosotros los políticos abrimos puertas, los contratos los cierran las empresas entre sí y lo importante es que el resultado sea la creación de puestos de trabajo de calidad», dijo Bomba.
Fuente: Terra
