Ante el anuncio de un aumento del 6 por ciento en el precio del combustible, vigente a partir de hoy, el sector del transporte de cargas se ve nuevamente perjudicado en un incremento de sus costos totales.
La suba en el combustible impacta fuertemente en la actividad ya que es uno de los insumos principales y representa, al menos, un 35 por ciento de los costos del autotransporte de cargas de larga distancia.
Según el último índice realizado por el Departamento de Estudios Tributarios y el Observatorio de Costos de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC), en diciembre pasado los costos se incrementaron en un 2.5 por ciento y alcanzaron el 21.8 por ciento en 2015. Teniendo esto en cuenta, y a partir de los anuncios, la suba del gas oil podría repercutir en, al menos, un 2 por ciento en los costos del transporte de enero de 2016.
«En un contexto mundial donde el valor del petróleo está en baja, vemos que los importes relacionados a las gasolineras aumentan a nivel interno de manera exponencial, prácticamente doblando los internacionales. Esto repercute de lleno en nuestra actividad ya que trae aparejado una suba significativa en los costos totales que, una vez más, se ven golpeados por factores y decisiones ajenas al sector. Es por eso que resulta necesario trabajar en conjunto con todas las actividades productivas del país a los efectos de generar tarifas más eficientes y competitivas», asegura Juan Aguilar, secretario de Prensa y Relaciones Institucionales de FADEEAC.
Fuente: Prensa FADEEAC