Los buques deben disminuir sus cargas

 |   12 de enero del 2009
Los buques deben disminuir sus cargas

Debido a la falta de lluvias significativas, el río Paraná enfrenta una histórica baja que tiene un efecto directo sobre el negocio de la exportación de granos. A través de los puertos ubicados en torno de Rosario, se embarca el 82 por ciento de la producción. En esa ciudad, durante los últimos días, el hidrómetro -una medida de referencia-marcó una altura de 1,02 metros, contra más de 2,40 de hace menos de 20 días, de acuerdo a una información que difundió el Diario La Nación.

Alfredo Sesé, secretario técnico de la Comisión de Transporte de la Bolsa de Comercio de Rosario, indicó que «no están en riesgo las exportaciones, pero hay menos agua, los buques tienen que salir con menos carga y completar más en otros puertos, con lo cual se incrementan los costos». Actualmente, los principales trastornos se relacionan con el incremento de los costos para embarcar más mercadería en otros puertos, como en Bahía Blanca o en el sur de Brasil.

Ante la falta de calado, que de los 34 pies ha tocado los 29,3 pies, se calcula que cada pie menos de calado significa para un buque la pérdida de unas 1800 toneladas.

«En cinco pies menos son entre 8000 y 9000 toneladas de pérdida por buque», comentó el especialista. Otro experto hizo la misma cuenta. En realidad, sobre la medida habitual de 2,47 metros hoy la altura del hidrómetro es, con 1,02 metros, 1,45 metros menor. «Seguro que hace más de diez a doce años que no se daba esta situación», remarcó. Si un buque para granos venía saliendo con unas 40.000 toneladas de la zona de Rosario, ahora partiría con unas 32.000 para luego completar en otros sitios. Otros parten con más carga, pero esto puede variar según la mercadería. Igual, no todos salen llenos y completan en otros destinos. «Algunos barcos no pueden cargar todo lo que pueden», comentó Sesé.

Carga en el puerto

Según informó Alfredo Sesé, en la zona de San Lorenzo, San Martín y Timbúes hay unos 20 buques cargando. Hay uno que está con nafta, trece cargando harina de soja y subproductos, tres con trigo y uno con aceite. Hay, además, otros dos barcos esperando órdenes para hacer lo mismo. «Hay pocos barcos que van a entrar, pero esto puede perjudicar más a los buques con carga de granos que subproductos, que son más chicos», señalan en la entidad.

Un barco con grano podía salir con entre 40.000 y 45.000 toneladas, con harina de soja se podía tratar de unas 35.000 toneladas y de 30.000 con aceite de este producto.

https://www.skynde.com/

Redacción Énfasis Logística

Te podría interesar