La restricción para los camiones de transporte de cargas pesadas en las rutas llegó también a Buenos Aires. La veda fue aplicada el último fin de semana en las rutas hacia los principales destinos turísticos con el fin de facilitar el desplazamiento de los veraneantes en el segundo recambio de temporada.
Según informó el Ministerio del Interior, la limitación se aplicó viernes, sábado y domingo entre las 20 y las 5 del día siguiente para camiones de cargas generales y peligrosas de más de 3.500 kilos. La medida será desplegada durante todos los fines de semana de febrero, según indicó el Felipe Rodríguez Laguens, director Ejecutivo de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV).
La operación de control cuenta con el apoyo de la Gendarmería Nacional, la Subsecretaría de Transporte Automotor, la Dirección Nacional de Vialidad (DNV), la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT), la Secretaría de Turismo, las provincias y las cámaras empresarias del transporte automotor de cargas.
Además, los dispositivos de seguridad incluyen controles de alcoholemia y de velocidad, según manifestó la ANSV. Los controles de velocidad se realizarán a través de la puesta en marcha de radares fijos y móviles, en pos de la reciente adhesión de la provincia de Buenos Aires a la ley 26.363.
Las autoridades viales aconsejan a los conductores respetar las velocidades máximas y mínimas, circular con las luces bajas encendidas, no sobrepasar vehículos en la doble línea amarilla y utilizar el cinturón de seguridad, además de evitar viajar durante la noche, cuando la visibilidad disminuye, y contar con la verificación técnica vehicular correspondiente.
