La bajante del Paraná en la zona de Rosario comenzó a traer complicaciones en las áreas portuarias del polo sojero exportador. Como consecuencia del descenso del río, que a la altura de Rosario alcanzó ayer 1,74 metros, un buque de bandera liberiana, que había cargado trigo en Puerto General San Martín, quedó varado en el canal de navegación a la altura de Arroyo Seco, a unos 50 kilómetros al sur de esa localidad. La obstrucción de esta embarcación impide que otros 20 barcos puedan salir por el Paraná rumbo al Río de la Plata.
Según señalaron fuentes de Prefectura Naval Argentina, “a causa de la bajante del río los barcos están obligados a cargar menos de lo previsto, porque el calado ha bajado de manera notable las últimas dos semanas”. En esta zona de la hidrovía el canal de navegación tiene un calado de 32 pies desde Puerto General San Martín hacia el sur. Las complicaciones por la bajante obligaron a algunas terminales portuarias a suspender el otorgamiento de cupos para la carga de cereal.
ADM informó que debido a los atrasos logísticos quedaron “suspendidos” los cupos de trigo en la unidad VI de Rosario hasta nuevo aviso. La empresa pidió a sus clientes que no envíen más camiones al puerto ya que no serán descargados. Según señaló el portal Punto Biz, en Nidera comunicaron que “como el problema del buque varado en Arroyo Seco persiste, nos vemos obligados a suspender la logística de maíz en Puerto General San Martín asignada para el lunes y martes. Pedimos que se informe a los cargadores a fin de evitar problemas, ya que en la planta estará imposibilitada la descarga”.
Perjuicios
“Se están produciendo importantes demoras operativas portuarias y de navegación, ya que buques que finalizaron sus embarques (alrededor de 20) no pueden zarpar como así tampoco pueden navegar los que en el Río de la Plata se hallan a la espera de poder subir los puertos de embarque”, afirmó Alberto Tello, del Centro Marítimo. “Las terminales de embarque se hallan también terriblemente afectadas ya que no pueden cumplir con sus compromisos, no pueden recepcionar las cargas de los miles de camiones que se hallan esperando para descargar en las playas y están sufriendo perjuicios incalculables”, agregó.
El buque de bandera liberiana varado se halla asistido por un remolcador, pero hasta ayer los intentos por reflotar al buque no dieron sus frutos. Los operarios portuarios consideran que en caso de que la bajante continúe frenará la salida de todas las producciones por algún tiempo más.
Preocupación
La preocupación por la bajante del río Paraná no sólo afecta a los dueños de las lanchas y barcos, sino también a Aguas Santafesinas. “Hoy la capacidad de captación que tenemos es entre 27 y 28 mil metros cúbicos por hora. Captamos todo lo que necesitamos para potabilizar. Pero de seguir esta tendencia (bajante del río) puede haber problemas”, afirmó el gerente de Relaciones Institucionales de Assa, Guillermo Lanfranco. “Ya desde 1,60 o 1,50 podríamos tener alguna dificultad, que se reflejará en captar agua del río y producir”, detalló Lanfranco, quien explicó: “Hoy estamos trabajando con los equipos que normalmente tenemos en operación y también los que tenemos en reserva”. A los 9 equipos históricos de captación de agua se sumaron otros 6, con lo que suman 15. Pero la empresa incluso tiene guardado algún equipo extra “para un momento crítico, para enfrentar una bajante intensa”, adelantó. De todos modos, aclaró que “hay un límite físico para sumar equipos”.
Fuente: El Litoral – GlobalPorts
