El Grupo Volvo certifica mecánicos especialistas en buses de la red de concesionarios oficiales del país, a través del programa internacional Bus Key Technician (BKT). Para recibir esta certificación, los mecánicos tuvieron que pasar por una serie de pruebas teórico/prácticas y por una exigente evaluación que implicaba desde una identificación e interpretación de fallas, hasta diagnósticos avanzados de electrónica sobre los buses de la marca.
Bus Key Technician (BKT) es un programa global que empezó en Suecia en 2010, dos años después llegó a Latinoamérica y a Argentina lo hizo de la mano del Centro de Desarrollo de Competencias del Grupo Volvo en América Latina en 2014. El programa tiene por objetivo capacitar y certificar periódicamente técnicos especializados en buses con el fin de prestar un servicio de excelencia para los clientes.
Christofer Ferreira Panatta, Instructor Técnico de Volvo Buses Brasil, explica: “el Bus es un producto muy específico con mucha electrónica, de modo que es necesario que el técnico tenga una capacitación diferente a la de camiones. Todo el sistema del bus es más complejo, y sumado a que el carrozado es externo a fábrica, el técnico debe ser experto para que la interfaz con la carrocería no afecte el funcionamiento del vehículo”.
Previo a la certificación, técnicos especialmente seleccionados por los concesionarios participan de una formación teórica y práctica durante un año. Al finalizar este período de entrenamiento, los mismos son evaluados por Instructores del Centro de Desarrollo de Competencias de Volvo América Latina. Con esta última certificación, Volvo Argentina ya posee 11 mecánicos BKTs brindando servicio en la red de concesionarios oficiales.
“La evaluación consiste en ocho estaciones de trabajo donde deben ponerse en juego todos los conocimientos necesarios para atender un bus: se busca que el técnico pueda hacer un buen diagnóstico y resolver el problema en el menor tiempo posible” señala Guido Cotarelo, Responsable de Desarrollo de Red del Grupo Volvo Argentina.
Las instancias de certificaciones se realizan una vez por año, con validez de tres años. Una vez pasado ese tiempo, el técnico debe volver a certificarse para garantizar que siempre esté actualizado: “Para hacer frente a la evolución tecnológica de los vehículos, es necesario invertir permanentemente en el desarrollo de los mecánicos. Los productos Volvo tienen mucha tecnología, entonces es complejo trabajar con ellos porque un sistema puede afectar a otro”, advierte el Instructor de Brasil. La capacitación constante de los técnicos que se desempeñan en la red de concesionarios de la marca es parte de una estrategia de Volvo para mejorar cada vez más la atención y la satisfacción de los clientes de la marca.
La certificación de BKTs es una actividad clave en perspectivas del crecimiento del negocio de Buses en el mercado local. Una red en constante profesionalización asegura una mayor disponibilidad de las unidades en circulación, por ende un óptima dinámica de operación. “Lo más importante para Volvo hoy es el éxito del cliente. El bus no puede quedar detenido -plantea Cotarelo-, por eso se necesita un técnico especialista que lo atienda lo mejor y más rápido posible”.