El director de gerencia de esa firma, el uruguayo Gabriel Kaklouk, relató que la firma a su cargo viene trabajando hace más de un año en el proyecto que permitiría reactivar el puerto de Juan Lacaze, situado 150 kilómetros al oeste de la capital uruguaya. El recinto cuenta con un muelle de 98 metros de longitud y una profundidad de 4,5 metros. La operativa actual en esa terminal comprende el transporte fluvial de combustible con destino a la planta local de la petrolera estatal, Ancap.
Las autoridades de la Administración Nacional de Puertos (ANP), anunciaron recientemente que el organismo invirtió una cifra del orden de los US$2 millones para la construcción de un tacón, que es un muelle en forma de ele (L) para permitir que buques Ro-Ro bajen su rampa en el muelle e, incluso, lo hagan buques con doble rampa. Con las condiciones actuales de infraestructura “hoy podríamos comenzar a trabajar”, aseguró el entrevistado, aunque advirtió que la falta de defensas y algunos otros elementos determinan que el atraque de los buques sea muy lento, a diferencia de las terminales argentinas.
Kaklouk recordó que, desde el 21 hasta el 23 de octubre, el buque “Intrépido”, de bandera paraguaya y que pertenece a ISL, realizó en forma satisfactoria pruebas de maniobras en el cauce del río, atraque a muro y rampa con descarga y carga de diferentes bienes y en una iniciativa que fue coordinada con la ANP, la Prefectura Naval local y la Dirección Nacional de Aduanas.
El representante de ISL adelantó que su firma no sólo piensa en un feeder que transporte camiones, sino también en todo tipo de vehículos y contenedores. “Queremos llevar los camiones que transportan su carga habitual de puerto a puerto. Es decir, cargas que lleguen en tránsito a Argentina que puedan ser almacenadas en Juan Lacaze (maquinaria, vehículos, contenedores), y después ser cruzadas a ese país”, dijo Kaklouk. El puerto, además, puede funcionar como una extensión del de Montevideo, y almacenar mercaderías que luego pueden ser transferidas a distintos puntos del vecino país, agregó.
ISL utilizará inicialmente el buque “Intrépido”, el mismo que hizo las pruebas descriptas en Juan Lacaze. La nave tiene 95 metros de eslora y 15 metros de manga y está dotado de una rampa para 90 toneladas. Al comienzo de la operativa, “queremos hacer dos viajes por día a La Plata y en cada uno transportar unos 25 camiones. La otra opción es que el puerto de descarga sea Buenos Aires. En este caso, sería un viaje por día y podríamos transportar, en un barco más grande, hasta 50 camiones”, explicó. El trayecto a uno u otro puerto insumirá entre cuatro y seis horas.
“Este proyecto generará 100 puestos laborales directos y no empieza y termina solamente con camiones, sino que se va a abrir un espectro logístico a través de la figura de puerto libre muy interesante, en donde también va a ayudar a la zona franca de Colonia”, anticipó.
Fuente: MundoMarítimo