Las soluciones tecnológicas ya son parte de la columna vertebral de la actividad logística: los sistemas de SCM están maduros y demostraron ser los mejores aliados de cualquier compañía que necesita optimizar inventarios, controlar los costos totales de operación, lograr una trazabilidad absoluta de punta a punta de los recursos y hacer más eficientes todos los procesos relacionados con transporte y almacenamiento.
La tecnología de la información ha dotado a las empresas de una agilidad comercial nunca vista. Esa misma tecnología se presenta como el complemento facilitador que permite responder desde el punto de vista de la logística con la eficiencia operativa que espera el mercado.
El impacto ha sido muy grande. El proceso cubierto por las cadenas de suministro era extremadamente costoso, lento, desintegrado y engorroso administrativamente en el pasado cercano: teléfonos, papeles, correos físicos, desconocimiento del estado de la carga y los transportes, fechas aproximadas, mínima trazabilidad, imposibilidad de conocer los costos reales, etc. En los años 90 las multinacionales tenían departamentos de compras, comercio exterior y áreas de logística de almacenes y despacho multitudinarias.
Hoy, las propuestas comerciales incluyen los «Black Friday», «Cyber Monday» y «Hot Sales», sitios de venta, compra en mercados globales, ventas y servicios móviles, etc. Y si bien aún pueden existir problemas o errores, el resultado de la aplicación de IT se traduce en productos que recorren la cadena logística del primer proveedor al último cliente con una gran efectividad sin importar distancias, fronteras, idiomas o medios de pago o transporte.
Si bien las tecnologías móviles y de la nube habilitaron la incorporación masiva de este tipo de soluciones, gracias a la ubicuidad que provee la movilidad y a la flexibilidad para incorporar tecnología con costos controlados que ofrece el esquema cloud, la innovación que más se destacará en este segmento es internet de las cosas: el hecho de que la flota, las maquinarias de producción, los depósitos y hasta las mercaderías en tránsito puedan estar enviando datos en tiempo real en todo momento y que, gracias a herramientas de big data, esos datos se transformen en información útil, llevará a todo el proceso logístico a niveles de eficiencia nunca vistos.
Mano en mano
Para los consultores, la misión es que la implementación abarque todas las áreas involucradas en el proceso logístico.
En general, los diferentes proveedores que se dedican a la tecnología aplicada a la logística han desarrollado algunos productos antes que otros dependiendo de su expertise; al agregarse desarrolladores, se fueron completando los «huecos» y se dedicaron a nichos, de manera de presentar una oferta completa y pareja para todas las etapas y operaciones. En realidad, lo importante es que la implementación se vaya haciendo en aquella etapa cuya ecuación costo-beneficio sea mejor, y escalar a las etapas siguientes.
Las tendencias que llegan para atar la tecnología y la logística son, sin dudas, la de internet de las cosas y también la internacionalización de empresas y la expansión del fenómeno de globalización, que provoca que la logística y el comercio exterior tengan que integrarse cada vez más.
A eso se suman la expansión del eCommerce y el desarrollo de su logística (y el ejemplo es AMAZON). El transporte y su diversificación, que está creciendo hacia una mejor utilización de la intermodalidad, por ejemplo la vinculada al transporte ferroviario con el de carretera y el del marítimo con el de carretera. Otra tendencia es la visibilidad de la cadena de suministro cada vez más tecnificada, con portales de proveedores herramientas de eSourcing, y subastas para negociaciones de compra, herramientas tecnológicas de gestión de proveedores, de homologación de productos, del ciclo de vida de la documentación asociada al proveedor/producto, de gestión del riesgo-proveedor, etc.
También está en aumento la colaboración con parteners y proveedores, aumentando los niveles de integración y colaboración de las empresas vertical y horizontalmente; se conforman cadenas logísticas más eficientes y eficaces, y obliga a una mayor coordinación e intercambio de información con sistemas seguros de intercambio de datos, transparentes y rápidos.
Vamos hacia un mundo de logística de máxima eficiencia. Las demoras en las entregas o la falta de stock tienden a ser cuestiones del pasado. Pero a la vez el futuro se revela cada vez más desafiante a la vez que exigente. Todos los operadores tienen acceso a la misma tecnología y la velocidad de adopción de la misma va a ser una clave competitiva. Y también exigente porque si bien la accesibilidad y usabilidad de las aplicaciones es cada vez más sencilla, las empresas van a tener que adaptarse y estandarizar en base a los procesos que ya están disponibles en el mundo digital.
Lazos reales
El que adopte IT y se adapte adecuadamente tendrá la posibilidad de diferenciarse en velocidad de reacción, eficiencia, eficacia, integración y costos. Como en general se trata de automatizar procesos de punta a punta, lo ideal es comenzar con un análisis de cómo funcionan esos procesos y cómo se pueden “traducir” al universo digital. Por supuesto, los tiempos dependerán del tamaño de la organización, de la complejidad de los procesos logísticos y del avance en materia de automatización ya hecho. Debemos tener en cuenta la dinámica de la actividad y los planes de la empresa, y entender cuál es el fin específico para el cual se implementa la tecnología.
Entonces, el proceso de Implementación de Tecnología de la Información debe iniciar con un “roadmap en el que se despliegue en el tiempo el comportamiento que se planifica para el negocio (crecimiento, diversificación, mudanza, etc.) y, en paralelo, el detalle de las aplicaciones/herramientas a implementar; el objetivo es evaluar en la línea de tiempo las oportunidades, amenazas, fortalezas y debilidades, para decidir qué implementar, cuándo hacerlo, que métricas se esperan modificar y en qué magnitud. Luego de la decisión de inversión, los pasos de implementación de proyecto habituales: alcance y diseño, realización, pruebas, puesta en marcha y soporte. El desarrollo de los negocios puede ser acompañado ocasionalmente por un golpe de suerte, una idea genial o una oportunidad única; pero siempre deben ser acompañados por una inversión. En la actualidad las inversiones no son garantías de desarrollo si están limitadas a las «partes duras» de la actividad, sino que tienen que incluir la tecnología de la información, complemento ideal, ya que el que es bueno con la logística y agrega IT, puede ser mejor.