El cambio en las empresas en el Chile Pospandemia

Un estudio analizó el impacto del Covid-19 en el ámbito organizacional, los resultados en términos del futuro del trabajo, optimización de presupuestos y desarrollo del talento.

 |   2 de febrero del 2022
El cambio en las empresas en el Chile Pospandemia

El reporte denominado «El cambio en las empresas en el Chile Pospandemia». publicado por élogos comparte 7 claves que definen las transformaciones que experimentan las compañías radicadas en Chile en la actualidad.

“La pandemia ha supuesto un golpe brutal en el ámbito económico, social y sanitario del que estamos saliendo relativamente bien y rápido. Además ha acelerado los procesos de digitalización de la sociedad y de la economía, consolidando algunos cambios que ya estaban en marcha, pero en otros aspectos se volverá en buena parte a la situación anterior”, señaló Daniel Wilner, Director General de élogos, con motivo del lanzamiento del reporte.

No obstante, destacó que aún no se aprecian con claridad todas las consecuencias que produjo y está produciendo el Covid-19 en la organización del trabajo, entre las cuales identificó:

  • · Una mayor inversión en tecnología y en formación, especialmente en la adaptación de los colaboradores a las nuevas exigencias laborales, en la gestión y en la aceptación y asimilación del cambio.
  • · El doble esfuerzo de inversión en tecnología y capacitación, lleva aparejada, ineludiblemente, la adaptación de los procesos de trabajo y de medición de la productividad.

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7 claves que definen las transformaciones que experimentan las empresas chilenas

El estudio emitido por  la Consultora dedicada a la capacitación, aportó las siguientes conclusiones:

1. Se están produciendo cambios culturales irreversibles en el sistema económico y en el ámbito organizacional. Los ambientes laborales, los modelos de capacitación, y hasta los espacios físicos de oficinas y lugares de trabajo, están cambiando hacia modelos mucho menos rígidos que no siempre son verticales y que necesitan habilidades fluidas.

2. Existe una necesidad creciente por definir perfiles adaptables, abiertos al cambio y basados en competencias, y no en desempeños cerrados.

3. El no tener que desplazarse siempre al lugar de trabajo, los nuevos protocolos de comportamiento en videoconferencias y el hecho de que los colaboradores y trabajadores perciban una mejor conexión a través del videotrabajo, exigen que las empresas y sus directivos opten por tecnologías y formaciones que acepten esa nueva realidad y se preparen para desarrollar una cultura de empresa cambiante, flexible y adaptable.

4. La mejora de la productividad que se consigue con la tecnología y con la capacitación tiene que basarse en los objetivos de la empresa, pero también en la calidad de vida en el trabajo y en la adaptabilidad para la consecución de metas. Dicha mejora se traducirá probablemente en reducciones de jornada a finales de esta década.

5. La conciliación (flexibilidad horaria, teletrabajo), la calidad de vida y la compatibilización con intereses y hobbies particulares, están en este momento por sobre o al mismo nivel de la negociación salarial (según Gallup 2019, Flexjobs 2020 y TOT/Newsbook 2019-20). Éste es un indicador que muestra a las claras la nueva realidad en la que nos movemos.

6. A finales de esta década se necesitarán menos trabajadores disciplinados y obedientes, pues muchos de los puestos de trabajo actuales serán ocupados por robots o máquinas de inteligencia artificial que tendrán un mejor desempeño. Pero sí se necesitarán colaboradores creativos, innovadores, empáticos y comprometidos. Muchas empresas ya han entendido este cambio, y ahora sólo falta incorporarlo al ADN de las organizaciones a todos los niveles. Y ningún cambio es fácil.

7. La vuelta a la “normalidad” pospandemia que se produciría en este 2022, verá en Chile un cierto retroceso de las tendencias ya apuntadas en este informe, como está sucediendo en Europa y en muchas partes de Estados Unidos. Pero las empresas que no entiendan estas tendencias y que no aprovechen la situación para acelerar los cambios no estarán bien preparadas para la sociedad hacia la que avanzamos: mucho más digital y flexible.

“Desde élogos, celebramos que la prioridad de las empresas en la nueva realidad pase por la inversión en capacitación, especialmente en la formación a distancia, en la que somos especialistas”, señaló Daniel Wilner.

“Pero también elogiamos la apuesta decidida por la capacitación para la adaptación de los colaboradores a los cambios y a la nueva cultura organizacional de las empresas”, añadió.

 

 

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Marizú Olivera Orquera

Lic en Comunicación Social, redactora y periodista. Encargada editorial en Énfasis Logística 2021.

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