La Confederación General Empresaria (CGERA) junto a otras entidades empresarias que se han manifestado, «están del lado de los intereses de Argentina, apoyan lo actuado por la Ministra Débora Giorgi y el Secretario de Industria, Eduardo Bianchi. Rechazan las medidas que Brasil ha tomado contra la producción nacional de automotores y autopartes, por ser absurda, violenta e injustificada, siendo que Argentina le da un tratamiento preferencial a ese país y le abre su mercado mucho más de lo que Brasil lo hace para Argentina».
Los empresarios manifestaron que «la Presidenta del Brasil solicita las simplificación de los trámites para las empresas que generan riqueza en su país; sin tomar en cuenta los daños que le produce a sus socio regional, y al mismo tiempo, anuncia incentivos a los exportadores para mejorar su competitividad en los mercados externos, lo que constituiría una verdadera apología del dumping; práctica vedada por la OMC».
Necesidad de unificar criterios
Los industriales PYME expresaron que «también es incompresible la actitud adoptada por ciertos sectores empresarios. La cámara que reúne a las empresas automotrices debiera tomar igual actitud que el resto de las asociaciones empresarias, ya que tienen regímenes especiales que no tienen otras industrias, pese a la poca integración nacional en sus componentes». «La balanza comercial con Brasil del complejo automotriz y autopartista es negativa, a pesar de que exportan el 48% de los autos que esta industria produce. Es decir, hay muchos más autos y autopartes brasileñas que nacionales en las calles argentinas. Cabe destacar que las empresas automotrices son las mismas de ambos lados de la frontera, y en muchos casos unas reportan a las otras».
Marcelo Fernández, Presidente de la entidad dijo que «es necesario solucionar el problema, por los puestos de trabajo que se ponen en riesgo, y lo mejor es empezar a que los privados tengamos una postura única y no pretender defender a un sector en detrimentos de otros». «La región no es un solo país, y los beneficios del MERCOSUR deben ser para todos. Argentina es el principal comprador de productos industrializados del Brasil, muy por encima del segundo comprador que es Estados Unidos, y su balanza comercial industrial con Argentina los beneficia en U$D 2.300 millones en lo que va del año, siendo que ellos tuvieron durante 2010 una balanza comercial de productos industriales negativa de U$D 70.800 millones» completó Fernández.