Fue aprobada la ordenanza que permite la apertura de un puerto regasificador en el Paraná de las Palmas.
El proyecto de terminal portuaria que depende de la sociedad entre Repsol-YPF y Enarsa todavía no se decidió si funcionará a través de una planta construida in situ, o si el fondeado de un buque regasificador, como el que funciona cerca de Bahía Blanca; los grandes buques cargados con el elemento combustible en forma líquida no pueden ingresar a puerto ni navegar el Paraná por su tamaño, por lo que la carga será trasvasada a buques menores, que remontarán la Hidrovía hasta la altura de Escobar, ya que al norte de este lugar, a pocos kilómetros, existe una curva que dificulta la navegación a barcos de gran envergadura, allí se realizará el proceso de retorno a estado gaseoso e inyectado a la red.
El proyecto, además, requiere de mejoras, como la repavimentación de la Ruta 25 entre Belén de Escobar y la ribera del Paraná, y la construcción de un camino alternativo que unirá el puerto con la panamericana a la altura de Loma Verde.
La construcción demandará una inversión de 150 millones de dólares y deberá estar en funcionamiento antes del invierno del 2011. La aprobación de la ordenanza, que incluye la posibilidad de que el futuro puerto tenga la categoría de multipropósito, modifica de hecho la calidad de tierras consideradas para esparcimiento a tierras para uso industrial, de acuerdo a la nueva zonificación establecida por el gobierno comunal, que todavía necesita de su aprobación por el gobierno de la provincia.
