El conflicto que el campo y el gobierno vienen manteniendo desde 2008, sumado a la problemática de la sequía y la crisis financiera internacional, se ve ahora reflejada también en el transporte de carga, según manifestó el titular de la Federación Argentina del Transporte de Cargas de Santa Fe (FATAC), Vicente Bouvier.
Desde el gremio expresaron su firme oposición a la imposición de una nueva cuota de la patente automotor, y recalcaron que con la crisis es imposible renovar las unidades y hacer frente a la suba constante de peajes en las rutas argentinas.
Bouvier admitió que el panorama para este año no es muy alentador debido a la retracción económica nacional, la paralización económica mundial y la falta de cosecha a causa de la sequía, que afectan de manera inminente al transporte de carga.
Según el dirigente de FATAC, «hay una capacidad ociosa del 50 por ciento», y la falta de trabajo y las inversiones que se han hecho en función a la actividad que se estuvo realizando en los años anteriores complican aún más el panorama.
Desde la Federación llamaron al gobierno a realizar acciones que permitan reanudar la actividad económica, a dejar a un lado las internas sectoriales y enfocarse en el crecimiento del sector.
Bouvier se refirió también a la caída de las ventas de las concesionarias en un 40 por ciento y a la anulación de compras de camiones y remolques, y adujo que la crisis económica se ve reflejada en numerosos despidos y suspensiones.
