La más reciente tendencia tecnológica en el sector de retail es el picking por voz, que consiste en la posibilidad de armar los pedidos a partir de órdenes verbales, que proviene de un sistema. Aunque parezca de ciencia ficción, en realidad la implementación es bastante sencilla.
El sistema trabaja interactuando en forma directa con el ERP que la empresa tenga instalado (por ejemplo SAP) o con el WMS, es decir el sistema dentro del ERP que gobierna el almacén. Las órdenes que el WMS le manda al operador son convertidas a comandos de voz mediante un sistema Traductor. El operador trabaja con auriculares y micrófono, recibiendo las indicaciones para realizar su trabajo y respondiendo mediante voz los resultados de la misma.
Dónde tiene que ir a buscar la mercadería, cuántos bultos debe tomar, y a que área de picking tiene que llevarlos son las opciones más típicas del proceso de voz y con ellas se van armando las órdenes de pedido del almacén.
El sistema tiene, además, una serie de validaciones para asegurarse que el operador está efectivamente en la posición correcta y que procede siguiendo las indicaciones del WMS.
Esta herramienta ofrece una gran cantidad de ventajas, comparado con los sistemas anteriores:
1. Diseño ergonómico y seguro: en el sistema tradicional, muchas veces los operadores deben completar datos en un teclado pero, al mismo tiempo, se ven obligados a utilizar guantes, por seguridad. En cambio, el diseño del sistema de picking por voz permite que el operador tenga las manos libres para trabajar y desplazarse por el almacén, de una manera más segura ya que puede concentrarse en observar los productos, su propio traslado, etc. La comunicación se realiza mediante un headset (equipo con auriculares y micrófono) sin más complicaciones.
2. Capacitación rápida y sencilla: el manejo de este tipo de sistemas requiere un mínimo entrenamiento, que consiste en la capacitación (operador por operador) para el reconocimiento de su voz. Como la herramienta utiliza una cantidad de palabras limitada (los números del 0 al 9, y expresiones que habitualmente se usan en la operación como “cerrar pallet”, “próxima ubicación”, etc.). El tiempo destinado para el entrenamiento es muy corto (por ejemplo 20 minutos). En ese lapso, y por única vez, cada operador tiene que practicar cómo decir esas palabras para que el sistema después las reconozca automáticamente.
3. Precisión en el armado de los pedidos: en el sistema tradicional, los operadores deben llevar en la mano pequeñas computadoras portátiles llamadas colectores de datos, y realizar el trabajo mediante la lectura de código de barras. Pero a veces ese código está dañado o no es correcto y, por ende, la performance en el armado de los pedidos no es la mejor. Con el picking por voz, los errores en el armado de los pedidos pueden reducirse entre 70 y 80 por ciento alcanzando un grado de efectividad de hasta el 99%.
4. Medición de la eficacia del personal: a diferencia de los sistemas tradicionales, el picking por voz permite medir la performance del operador. Por ejemplo, lo que éste demoró en trasladarse de una a otra posición o los tiempos de ejecución de las tareas. Por esto, también resulta una herramienta muy interesante para las empresas que pagan por productividad.
5. Rapidez en el armado de los pedidos: en el sistema anterior, el operador debe leer planillas o pantallas, y completar datos. Con esta modalidad el trabajo se agiliza enormemente, ya que no hay interrupciones en la operación continua.
6. Rápida recuperación de la inversión (ROI): si bien estos sistemas están brindando importantes retornos de la inversión en cuanto a la velocidad de armado de pedidos (por ejemplo de entre el 20 y el 35 por ciento de efectividad en los armados de pedidos), para justificar un ROI en el corto plazo se necesita un flujo continuo de trabajo. Para las grandes cadenas, lograr una efectividad del 10% en los tiempos de armado y poder disponer de la mercadería en más corto plazo, justifica rápidamente el monto invertido en la aplicación de la tecnología.
En Argentina ya son más de 20 las empresas de primera línea que gestionan sus centros de distribución con esta tecnología.
* El autor es Gerente Soluciones Mobile y RFID de Xioma, una empresa del Grupo Seidor.