La Mesa Interempresarial de Piratería de Camiones, organizada por el estudio de abogados Iezzi & Varone analizó recientemente que el blanco de los delitos denominados piratería del asfalto, apunta a la mensajería de ventas en internet. En diálogo con Énfasis Logística Roberto Rivero, director Ejecutivo y Oscar Farinelli, titular del Departamento de Seguridad, Fiscalización y Logística ambos de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC), analizan la situación de la seguridad en las rutas, que siempre tiene a los transportistas en vilo.
El fenómeno de la piratería del asfalto nace con bandas delictivas que se dedican como oportunidad de negocios a robar la mercadería que se transporta o las unidades completas para luego desguazarlas y vender las autopartes, algo que ocurre por el alto valor de reposición y la falta de acceso a nuevas unidades.
“El robo de mercadería a camiones ha descendido gracias al uso de custodia para los camiones –denominados culata-, y la incorporación de tecnología, que a través de medios electrónicos que informan en tiempo real sobre cualquier incidente que tenga la unidad”, explicó al respecto Roberto Rivero, director Ejecutivo de FADEEAC, y remarcó que se observa que “ el robo de mercadería a grandes unidades bajó mucho, aunque como contrapartida, con el auge del comercio electrónico y el aumento de envío de paquetería a través de unidades más pequeñas en los centros urbanos. Hubo un recrudecimiento del robo a esa clase de transporte. Son bandas que no tienen una gran sofisticación”.
En este marco el referente destacó que también se observa que a “partir de las dificultades para acceder a la compra de unidades nuevas, surgió el robo de unidades enteras”. Mientras que al ser consultado sobe zonas o referencias geográficas donde más se observa este tipo de delito, Rivero indicó: “La zona Oeste de la provincia de Buenos Aires (con foco en Moreno) es donde se registra la mayor cantidad de robos en la modalidad piratería”.
Sobre el estado de la seguridad en las rutas y la convivencia de los diferentes actores que desempeñan tareas para llevar a delante la seguridad para los transportistas, Rivero indicó: “Se debe realizar un accionar coordinado y eficiente de tres organismos que dependen del Ministerio de Transporte: la CNRT, la Agencia Nacional de Seguridad Vial y la Junta Nacional de Seguridad del Transporte (JST). Ellos deben coordinar las acciones en sus respectivas competencias porque tienen que ver con el estado en las rutas, seguridad en las rutas, pero también con controles de alcoholemia y de cargas, entre otras cosas. Tienen que coordinar su tarea con el Ministerio de Seguridad de la Nación y los ministerios de Seguridad de cada una de las provincias, las policías provinciales y las municipalidades”, detalló y añadió que si bien la coordinación se da, existen aún muchas diferencias en los controles “Por ejemplo, en los controles de frontera”, explicó.
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Por su parte al ser consultado sobre la situación actual en materia de seguridad en la rutas y el rol que desempeña FADEEAC a la hora de luchar contra la inseguridad en el transporte de cargas por carretera, Oscar Farinelli, titular del Departamento de Seguridad, Fiscalización y Logística de FADEEAC, explicó: “Desde hace más de 40 años, con la aparición de los primeros hechos de piratería del asfalto, FADEEAC, empezó a trabajar en el tema. Lo importante es que se logró una continuidad en el tiempo para el seguimiento de esta problemática”.
Farinelli subrayó que el seguimiento realizado por la entidad empresarial a diario “ha sido clave la permanente interacción con las fuerzas de seguridad y la Justicia lo que posibilitó, además de tener un cuadro de situación actualizado, aportar sugerencias para instrumentar medidas de seguridad en puntos estratégicos”, dijo.
En cuanto a números y estadísticas el titular del Departamento de Seguridad, Fiscalización y Logística también comentó que en lo que respecta al transporte pesado “el robo de mercadería en tránsito se encuentra en los niveles más bajos desde hace muchos años. El robo de unidades para su adulteración y/o desarmaderos está decreciendo en los últimos meses de manera notable. El robo de utilitarios, del tipo de los que se utilizan en la comercialización puerta a puerta, que había tenido su pico en 2020 en medio de la pandemia, también ha decrecido, aunque se mantiene constante en zonas más vulnerables”, explicó.
Al ser consultado sobre qué política a nivel de Estado, debería modificarse para optimizar las acciones ya existentes en el tema, y respondió: “Hay aspectos en materia de seguridad que sería bueno mejorar. En rutas nacionales e interprovinciales, por ejemplo, sería muy bueno incorporar cámaras de alta definición –especialmente en los límites interprovinciales- porque eso permitiría hacer un seguimiento más preciso de las unidades robadas. Asimismo, el sector viene solicitando controles más específicos en la fiscalización, orientados a la intervención de peritos de identificación automotor “.
Por último, debido a su experiencia sobre su visión en lo referido a la evolución que podría tener en los próximos años la problemática y de qué manera los transportistas se preparan para afrontarlo, Farinelli respondió: “La particularidad del momento actual en el que se registra una sensible carencia de repuestos y neumáticos genera incertidumbre. Desde nuestro lugar insistimos con la necesidad de reforzar la rigurosidad de los controles por parte de las fuerzas de seguridad y dotar de mayor dinámica a las investigaciones judiciales de las causas en trámite”, concluyó.
Nota completa publicada en Revista Énfasis edición octubre 2022. Ingresá aqui.
