Consultamos a referentes logísticos de diversos países de la región, gracias a la colaboración de ALALOG, quienes nos brindaron su visión sobre el sector, su actualidad, características y situación ante la pandemia. En esta oportunidad dialogamos con Claudia Sánchez Maldini, Editora Revista Logistec de Chile.
Énfasis Logística: ¿Cómo describiría la situación general del sector logístico de su país?
Claudia Sánchez Maldini: El desarrollo logístico chileno se encontraba en buen pie, a nivel general. La industria se caracteriza por ser un sector en constante movimiento, con empresas de consumo masivo y el Retail encabezando el desarrollo; mientras, por otro lado, está la minería que corre por un carril logístico propio. Unos de los puntos que han marcado la logística chilena en los últimos años ha sido la penetración del comercio electrónico, que ha estado marcado por el masivo acceso a la tecnología y el alto nivel de bancarización de la población. Buena parte de la industria, principalmente los grandes players, ya habían asumido que el comercio electrónico era el camino comercial y operacional; colocando sus ojos en la tecnología y optimización de la operación en los CD y la última milla. Sin embargo, no todos invertían en estas herramientas o habían diseñado un proceso logístico que se iba adaptando al eCommerce. “Tener el carro online” era la premisa, pero no necesariamente iba unida a inversión.
Por otro lado, la puesta en marcha del nuevo centro de distribución de Walmart, considerado el más grande de Chile en dimensiones y el más importante a nivel tecnológico, acaparó la atención de toda la industria a fines de 2019.
Otro foco de la industria logística, considerando el sello exportador, es la digitalización de la documentación logística en Comex, impulsado desde los organismos estatales y la constante mejora de los puertos y sus servicios anexos (terminales, depósitos aduaneros, transporte, etc.).
En términos generales, la logística nacional cumple con los objetivos que es mantener la cadena de abastecimiento (considerando el reto que significa la geografía chilena) y enfrentando el desafío de modernización de los procesos, de la mano de la transformación digital.
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É. L.: ¿Cuál fue el impacto de la pandemia en el sector?
C. S. M: Las primeras semanas de medidas sanitarias en Chile obligó a la industria a rediseñar sus procesos internos, principalmente por la obligación de la reducción de los turnos de trabajo, el reenfoque de su operación -considerando que las tiendas y centros comerciales están cerrados desde marzo con los efectos comerciales que eso significa- la sobredemanda de servicios de última milla ante el boom del comercio electrónico.
Ya, a contar de mediados de mayo, la operación ha logrado estabilidad. Si bien está exigida, ya comienza a responder de mejor forma, disminuyendo la incertidumbre en los consumidores. Abril, por ejemplo, fue un mes en que aumentaron significativamente los reclamos de los consumidores por la tardanza en las entregas, la falta de respuesta de las empresas ante las quejas de los clientes, la falta de información del stock, problemas con la logística de reversa, entre otros aspectos.
Pero a pesar de las complicaciones, la cadena de abastecimiento, en materia de productos esenciales, sobre todo, ha funcionado correctamente. Si bien la demanda sobrepasó en momento a la operación, el abastecimiento nunca se detuvo.
En materia de Comercio Exterior, tempranamente (mediados de marzo) la Aduana chilena puso en marcha una serie de medidas para la facilitación del comercio en su resolución exenta 1179, mediante la cual se puso en marcha la digitalización de ciertos procesos aduaneros (principalmente el canje del B/L Electrónico) debido a la reducción de personal en dichas entidades para evitar contagios.
É. L.: ¿Cómo es la situación en cuanto a los costos y la competitividad de las empresas logísticas?
C. S. M.: Por cierto los costos operativos a nivel intralogístico se han incrementado, no obstante, es válido afirmar que la competitividad del sector se mantiene en muy buen pie, principalmente debido a la implementación tecnológica y a que las operaciones Comex e interna se han mantenido. En este punto, existen sectores del rubro que han tenido un mejor pasar, si se quiere, por ejemplo: los proveedores de servicios de bodegaje y almacenamiento logístico –un mercado muy maduro en Chile- ha tenido un alto nivel de demanda y ha mantenido estable sus niveles de vacancia y tarifas. Los proveedores de servicios y tecnologías para el rubro logístico, también han visto incrementada su demanda, a partir del auge del eCommerce y el sector de los OPL también ha logrado mantenerse a flote con un servicio de calidad. A nivel Supply Chain, cabe destacar que todo el sistema global se ha visto comprometido, eso es innegable, con efectos perceptibles a nivel de volúmenes de carga (Teus) movilizados por ejemplo, no obstante, los puertos y aeropuertos del país han logrado mantener un servicio competitivo, y el esquema logístico interno también ha respondido.
É. L.: ¿Cómo definiría el nivel de servicio vinculado con el comercio electrónico?
C. S. M.: Este sector (servicios) es el que más ha crecido en el último tiempo. Han asomado importantes empresas vinculadas al servicio de última milla, tecnología de tracking, optimización de rutas, entre otros. La economía colaborativa ha sido fundamental para responder a la última milla, aplicando el concepto de “uberización” a la modalidad de negocio.
Ligado al eCommerce se encuentra el mercado de la tecnología que ha apuntado constantemente a ofrecer soluciones de optimización de la operación. RFID, automatizaciones, pick to light, sorter, correas transportadoras son algunas de las soluciones que se han ido masificando, pasando de las grandes empresas al resto de la industria.
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É. L.: En cuanto a la sustentabilidad de las operaciones, ¿cómo está posicionado el sector logístico local?
C. S. M.: La búsqueda de operaciones sustentable está vigente en la industria de logística nacional, tanto en términos de su modelo de negocio de las empresas, como en la gama de soluciones y tecnologías para el rubro. Pero queda mucho por hacer.
Aspectos como el uso de energías renovables en sectores como el bodegaje va en alza, promovidas también por las autoridades gubernamentales, principalmente el Ministerio de Energía. En este punto, la reducción de emisiones de carbono ya es un aspecto crucial y presente entre los actores del sector comercio e industrial del país (entre ellos el rubro logístico), que han integrado esta premisa a sus estrategias corporativas.
Cabe destacar que los clientes y consumidores chilenos demandan productos y una logística sustentable, amigables con el medio ambiente y valoran ampliamente a aquellas empresas que consideran este factor a nivel productivo y operativo.
É. L.: Sobre la implementación de tecnología y automatismos, ¿cómo describiría la actualidad de la logística en su país?
C. S. M.: Desde hace un tiempo, las empresas han comenzado a mirar sus procesos con ojos más críticos. Ante esta situación, el ‘rediseño’ de sus operaciones lo han entendido como la forma de prepararse para responder a los desafíos futuros de la logística. La masificación de las soluciones tecnológicas ha permito que las empresas -sin grandes inversiones que en un comienzo era una limitante para muchos sectores- comiencen a incorporar herramientas que buscan optimizar la operación, hacer eficientes los recursos, la necesidad de exactitud y sobre todo responder a la exigencia de rapidez operacional que demandas sus clientes. Los procesos más demandas en cuanto a tecnología son aquellos orientados a mejorar la operación de picking (preparación de pedidos) y última milla.
Para muchos ejecutivos esta mirada se debe al impulso que ha tomado el comercio electrónico y al convencimiento de que ese canal seguirá creciendo y hay que prepararse para estar a la altura; sin embargo, esta situación de Pandemia ha sido una prueba de fuego para las empresas. Sin duda, quienes han salido fortalecidos de esta crisis son aquellos que han marcado diferencias en su servicio y, sin duda, la tecnología está asociada a su operación.
En Chile la atención hoy en día la tiene el canal online y el desarrollo y crecimiento explosivo que ha tenido. No podemos dejar de mencionar que estos cambios también han obligados a los ejecutivos y profesionales a mirar la cadena logística como un todo y no como procesos aislado. En Chile la mirada de Supply Chain cobra fuerza sobre una mirada más ‘parcelizada’ de la logística.
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