Por: Eber Ramos Zegarra, Miguel Chávez Pimentel, Ramiro Alcántara Vera y Richard Mallqui Basilio (*)
El futuro de la cadena de suministros está íntimamente ligado a la evolución constante de las TI, y las organizaciones que abrazan esta realidad están destinadas a liderar el camino hacia la excelencia en la era digital. En este artículo se brindan aplicaciones concretas y útiles de Big Data, Realidad Aumentada, Realidad Virtual y Blockchain en la cadena de suministro.
En el mundo actual las organizaciones se encuentran inmersas en constante procesos de innovación y evolución, motivo por el que el manejo de la información se ha convertido en el actor principal para la toma de decisiones de las gerencias. Asimismo, de la calidad de la información con la que se trabaje dependerá el éxito o fracaso de las empresas. Por otro lado, el avance tecnológico ha brindado las herramientas necesarias para mejorar la accesibilidad y evaluación de la información en tiempo real, permitiendo a las empresas gestionar de manera más eficiente y productiva sus procesos.
La alta competitividad del mercado global exige que las empresas busquen de manera incansable la eficiencia y la optimización en todos los aspectos de su funcionamiento. En este contexto, la cadena de suministros emerge como un elemento esencial, donde cada eslabón desempeña un papel crucial en la satisfacción del cliente; así como la entrega de productos y servicios de calidad. En esta dinámica, las Tecnologías de la Información (TI) se erigen como pilares fundamentales para impulsar la transformación y la mejora continua en la cadena de suministros. Aportan herramientas y soluciones que revolucionan la manera en que concebimos y operamos nuestras cadenas de suministros.
Las TI están transformando toda la cadena de suministro haciendo precisos los flujos de demanda diarios pudiendo evidenciarse un mejor uso de los recursos e incremento de la satisfacción del cliente, puesto que el enfoque sistémico, la información en tiempo real y el análisis de datos han sido claves para mejorar la performance de toda la Supply Chain.
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Uno de los aspectos más destacados del uso de las TI es la capacidad de recopilar, analizar y compartir datos en tiempo real. La era digital ha dotado a las empresas con la habilidad de monitorear cada etapa del proceso de producción y distribución de manera instantánea y precisa. Desde la obtención de datos sobre inventarios hasta la optimización de rutas de entrega, la información fluye a través de los sistemas informáticos, permitiendo a las empresas tomar decisiones basadas en datos con un alto grado de certeza y rapidez.
Asimismo, la inteligencia artificial (IA) y el aprendizaje automático (machine learning) han revolucionado la forma en que se abordan los desafíos de la cadena de suministros. Estas tecnologías permiten la predicción y prevención de problemas antes de que ocurran, lo que resulta en una mayor eficiencia y menor incidencia de interrupciones en la cadena. La IA es capaz de analizar patrones complejos en grandes volúmenes de datos, lo que facilita la toma de decisiones más informadas y la optimización de los recursos.
En este contexto, la colaboración y la comunicación entre los diferentes actores de la cadena de suministros también han sido transformadas por las TI. Las plataformas digitales y las aplicaciones diseñadas específicamente para la gestión colaborativa permiten una coordinación más efectiva entre proveedores, fabricantes, distribuidores y minoristas. Esto no solo agiliza el flujo de productos, sino que también fomenta relaciones más sólidas y transparentes entre los socios comerciales.
10 formas de aplicar Big Data a la SCM
Esta herramienta tecnológica se refiere a la gran cantidad de datos que se generan, recopilan y procesan en la era digital. Estos datos son voluminosos, variados y complejos, lo que dificulta su manejo y análisis mediante enfoques tradicionales de procesamiento de datos. El concepto de Big Data se centra en la capacidad de aprovechar estos datos masivos para obtener información valiosa y perspicaz que puede conducir a una toma de decisiones más informada y a la identificación de patrones y tendencias.
La integración de Big Data en la SCM permite una mayor visibilidad, eficiencia y capacidad de adaptación en la gestión de operaciones logísticas y de abastecimiento.
Aquí hay algunas formas en que el Big Data se aplica a la SCM:
- Análisis de Demanda: Utilizando datos históricos de ventas, tendencias del mercado, eventos estacionales y otros factores, el Big Data puede ayudar a prever la demanda futura de productos con mayor precisión, lo que facilita la planificación de inventario y la programación de la producción.
- Gestión de Inventarios: El análisis de Big Data puede ayudar a optimizar los niveles de inventario, reduciendo los excesos y faltantes y mejorando la eficiencia de la gestión de almacenes.
- Monitorización en Tiempo Real: Sensores y dispositivos IoT pueden proporcionar datos en tiempo real sobre la ubicación y el estado de los productos durante el transporte y el almacenamiento, lo que mejora la visibilidad y la capacidad de respuesta.
- Optimización de Rutas de Transporte: Utilizando datos de tráfico en tiempo real, condiciones climáticas y otros factores, el Big Data puede ayudar a encontrar rutas óptimas para la distribución y el transporte, lo que reduce costos y tiempos de entrega.
- Gestión de la Cadena de Suministro Global: En cadenas de suministro globales, el Big Data puede ayudar a rastrear y gestionar de manera más eficiente los productos a medida que se mueven a través de diferentes países y regulaciones.
- Identificación de Patrones de Comportamiento del Consumidor: Analizar datos de redes sociales, reseñas de productos y otros canales puede ayudar a comprender mejor el comportamiento y las preferencias del consumidor, lo que permite una mejor planificación y diseño de productos.
- Gestión de Riesgos y Resiliencia: El análisis de Big Data puede ayudar a identificar posibles riesgos y problemas en la cadena de suministro, permitiendo una respuesta más rápida y eficiente a interrupciones y eventos inesperados.
- Colaboración en la Cadena de Suministro: El Big Data puede facilitar la colaboración y el intercambio de información entre socios comerciales a lo largo de la cadena de suministro, mejorando la visibilidad y la coordinación.
- Análisis Predictivo y Prescriptivo: Utilizando técnicas de análisis avanzado, el Big Data puede ayudar a prever eventos futuros y recomendar acciones específicas para optimizar la cadena de suministro.
- Monitorización de KPIs y Rendimiento: El seguimiento y análisis de indicadores clave de rendimiento (KPIs) en tiempo real pueden ayudar a medir y mejorar la eficiencia y la calidad de la cadena de suministro.
En general, la aplicación de Big Data en la SCM permite tomar decisiones más informadas, optimizar procesos y operaciones, reducir costos y mejorar la satisfacción del cliente a lo largo de toda la cadena de suministro.
La Realidad Aumentada (AR) y La Realidad Virtual (VR)
La Realidad Aumentada es una tecnología que combina elementos del mundo real con elementos generados por computadora, como imágenes, videos, gráficos o información textual, para crear una experiencia en la que las realidades física y virtual se superponen y se fusionan. En otras palabras, la AR permite añadir información digital a la percepción del entorno real a través de dispositivos tecnológicos, como smartphones, tabletas, gafas especiales u otros dispositivos AR.
La Realidad Virtual es una tecnología que crea un entorno simulado y completamente digital en el que los usuarios pueden sumergirse e interactuar como si estuvieran presentes en ese entorno, aunque en realidad están usando dispositivos tecnológicos para experimentar la simulación. La VR utiliza una combinación de hardware y software para proporcionar una experiencia sensorial inmersiva que puede incluir la vista, el sonido y, en algunos casos, incluso el tacto.
La Realidad Aumentada (AR) y la Realidad Virtual (VR) aplicadas a la SCM, son tecnologías que combinan elementos virtuales y físicos para mejorar la eficiencia, la precisión y la toma de decisiones en diversos aspectos de la cadena de suministro. Aunque AR y VR son conceptos relacionados, se utilizan de manera diferente en la SCM.
- Realidad Aumentada (AR) aplicada a la SCM:
La AR superpone información virtual (como gráficos, texto o imágenes) sobre el entorno físico en tiempo real. En el contexto de la cadena de suministro, la AR puede ofrecer información visual y contextual a los trabajadores mientras interactúan con objetos físicos.
5 Aplicaciones de AR en la SCM:
- Visualización de Datos en Tiempo Real: Los trabajadores pueden usar dispositivos AR para ver información en tiempo real sobre inventario, procesos de producción y rutas de envío mientras trabajan.
- Selección y Embalaje en Almacenes: La AR puede guiar a los empleados para seleccionar los productos correctos y proporcionar instrucciones de empaque óptimo en tiempo real.
- Entrenamiento y Formación: Los nuevos empleados pueden recibir capacitación usando AR para simular escenarios de cadena de suministro y aprender procesos de manera interactiva.
- Inspección y Mantenimiento: Los técnicos pueden usar AR para acceder a guías visuales y manuales mientras realizan inspecciones y mantenimiento en activos y equipos.
- Navegación y Ubicación: Los trabajadores pueden navegar en almacenes y centros de distribución siguiendo indicaciones visuales superpuestas en su campo de visión.
- Realidad Virtual (VR) aplicada a la SCM:
La VR crea un entorno completamente virtual en el que los usuarios pueden sumergirse. En el contexto de la cadena de suministro, la VR se utiliza principalmente para simulaciones, entrenamiento y visualización inmersiva de procesos y entornos.
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5 Aplicaciones de VR en la SCM:
- Simulación de Procesos: Los empleados pueden practicar y perfeccionar procesos de cadena de suministro, como la planificación de rutas o la gestión de inventario, en entornos virtuales realistas.
- Entrenamiento de Condiciones Extremas: Los trabajadores pueden ser entrenados para manejar situaciones extremas, como desastres naturales o interrupciones en la cadena de suministro, en un entorno seguro y virtual.
- Diseño de Almacenes y Distribución: La VR puede ayudar a diseñar y optimizar almacenes y centros de distribución antes de su construcción física.
- Revisión de Procesos y Flujos de Trabajo: Los equipos pueden revisar y mejorar procesos de cadena de suministro en un entorno virtual, identificando cuellos de botella y oportunidades de mejora.
- Planificación de Rutas y Transporte: Los responsables de la cadena de suministro pueden planificar y simular rutas de transporte en entornos virtuales para optimizar la distribución.
Estas tecnologías tienen aplicaciones valiosas en la SCM, mejorando la eficiencia, la formación y la toma de decisiones al proporcionar una experiencia visual y práctica que puede potenciar la comprensión y la interacción con la cadena de suministro física y sus procesos.
Blockchain: trazabilidad a la orden del día
Es una tecnología de registro distribuido que permite el almacenamiento, la verificación y el registro de transacciones de manera segura y transparente. Esencialmente, es un libro de contabilidad digital que registra todas las transacciones en bloques enlazados de manera cronológica y segura, de ahí el nombre «blockchain» o «cadena de bloques».
La aplicación de la tecnología blockchain a la SCM se refiere al uso de la cadena de bloques para mejorar la transparencia, la trazabilidad y la seguridad en las operaciones y procesos de la cadena de suministro. Al aprovechar las características únicas de blockchain, se puede crear un registro inmutable y transparente de las transacciones y eventos a lo largo de toda la cadena, lo que puede tener varios beneficios para la eficiencia y la confiabilidad de la gestión de la cadena de suministro.
Algunas formas en que blockchain se aplica a la SCM incluyen:
La aplicación de esta tecnología a la SCM busca aumentar la visibilidad, la confianza y la eficiencia en las operaciones, al proporcionar un registro seguro y transparente de las transacciones y eventos a lo largo de toda la cadena. Esto puede ayudar a resolver desafíos clave en la cadena de suministro y mejorar la colaboración entre los participantes.
(*) Alumnos de la Maestría en de la Escuela de Posgrado de la Universidad de Lima – Perú.
Nota completa publicada en Revista Énfasis edición septiembre 2023.
