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19 de octubre del 2020

Convenio para dragado del Puerto de Mar del Plata

 |   19 de octubre del 2020

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El Ministro de Transporte de la Nación, Mario Meoni, firmó hoy con el Consorcio del Puerto de Mar del Plata, un Convenio de Cooperación Específico para el dragado de mantenimiento del Puerto de marplatense.

 

Con un aporte de $200 millones, el Ministerio de Transporte de la Nación que encabeza Mario Meoni, firmó hoy un Convenio de Cooperación Específico para el dragado de mantenimiento del Puerto marplatense, con el Consorcio del Puerto de Mar del Plata, que mejorará la operatividad del puerto, contribuyendo a incrementar la competitividad de la zona y generando un directo beneficio para los productores de la región. Además, la recuperación de profundidades de navegación adecuadas para el arribo de buques portacontenedores, de cargas de combustibles, pesqueros y pasajeros. En esa línea, luego de cuatro años de no acompañamiento a la concesionaria, conjuntamente con el aporte económico, el Ministerio de Transporte brindará asistencia técnica a la concesionaria, para encontrar la solución final en el dragado, lo que implicará un recurso determinante en el futuro, a pesar de la decisión en la gestión anterior de no acompañamiento.

En este marco, el Ministro Mario Meoni expresó: “El presidente Fernández nos pide que pensemos en el desarrollo federal del país, y con Axel venimos trabajando hace mucho y pensando el desarrollo de los puertos. Este puerto de Mar del Plata es central para el desarrollo de los puertos del país, no solo porque es de cargas sino también porque es productivo”. Y agregó: “Donde hay un puerto público tiene que haber inversiones, en consonancia con las inversiones en el sistema ferroviario para disminuir los costos logísticos. Más inversiones significa más puestos de trabajo, y ese es un objetivo que tenemos: que la logística esté al servicio de quienes generen trabajo y producción”.

En ese sentido, el ministro remarcó que “lo primero es que las embarcaciones puedan entrar, por eso el dragado es fundamental, pero también pensar en cómo dotarlo de mayores posibilidades de crecimiento, por eso trabajamos para el desarrollo de futuro con la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables. Hay que darle durabilidad”.

Por su parte, Sergio Massa agradeció el trabajo del ministro Mario Meoni y del Gobernador Axel Kicillof, y manifestó que “es momento de trabajar unidos”. “Este es un puerto central para toda la Argentina. El presidente planteó que el gobierno nacional iba a ir de la mano con Mar del Plata porque es una de las grandes capitales del país, y una de las ciudades que mejor expresa el federalismo. Tres meses por año todos los argentinos nos encontramos acá” dijo, y continuó “las tres jurisdicciones nos tomamos de la mano para entender que a Mar del Plata no solo no hay que abandonarla, sino que hay que ayudarla a salir. Es tiempo de empezar a construir la Argentina de la post pandemia, de poner en marcha el puerto en su inversión productiva, no solo dragado y planificación, sino en su proyecto de desarrollo económico. Hay un gran esfuerzo de inversión en obra pública para la ciudad, para empezar a pensar en el día de mañana”.

A su turno, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, dijo: “Esta es una inversión central. En la etapa anterior se les había cargado el costo de las obras de dragado, pésima decisión porque el puerto no las puede afrontar. Juntos hemos decidido hacer la inversión para el dragado” y sentenció “El puerto en Mar del Plata es una usina de producción y de empleo. En el momento más crítico, mostramos hacia donde ir y de qué manera ir. El puerto de Mar del Plata va a ser un motor de la recuperación de la ciudad y de la provincia. Es clave la inversión y los recursos que se liberan para otras inversiones de importancia. Esto no es para un intendente, es para los marplatenses, los vecinos de Batán y General Pueyrredón”.

Mientras tanto, la directora Ejecutiva de la Administración Nacional de la Seguridad Social, María Fernanda Raverta, expresó que “esta firma tiene que ver con lo que vinimos a hacer desde nuestra llegada al gobierno: pensar cómo mejoramos nuestra matriz productiva y generamos más trabajo, en especial en esta zona que duplica la media de desempleo del país. La prioridad de nuestro gobierno es reconstruir la Argentina, y el puerto es un motor de esa reconstrucción a través del empleo digno”.

También estuvieron presentes durante la firma, Guillermo Tristán Montenegro, Intendente de General Pueyrredón; Gabriel Felizia, presidente del Consorcio Portuario de Mar del Plata; y Augusto Costa, ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica de la Provincia de Buenos Aires.

En el Puerto de Mar del Plata se desarrollan actividades de comercio exterior e interior, vinculadas principalmente a la pesca, al abastecimiento de insumos y el despacho de los bienes producidos en su zona de influencia. Se proyecta transformarlo en un puerto internacional de cargas industrializadas.

Detalle de la obra:

El plazo de ejecución del dragado es de 36 meses y una vez finalizado permitirá potenciar el movimiento económico regional, dar seguridad a los navegantes, mejorando la operatividad de las embarcaciones con vista a aumentar la exportación de productos frescos industrializados, entre otras potenciales cargas. Por otra parte, contribuirá al afianzamiento y consolidación del proceso de crecimiento continuo de la actividad portuaria y el desarrollo de actividades locales.

El Ministerio, a través de la Subsecretaría De Puertos, Vías Navegables y Marina Mercante (SSPVNyMM), prestará la asesoría y los medios necesarios para la realización de relevamientos, batimetrías y demás estudios complementarios que se requieran para determinar las obras necesarias en el puerto.

A su vez, pondrá a disposición del Consorcio personal técnico para estudiar la viabilidad de futuras obras que puedan evitar el fenómeno de sedimentación del puerto. Por su parte, el consorcio realizará la contratación, supervisión y control de los trabajos.

Se concretarán los trabajos de mantenimiento de profundidades a través del dragado de 440.278 m3 más la acumulación producida hasta que efectivamente se lleven a cabo los trabajos, para alcanzar en el Canal Exterior – Progresivas 1.650 a 2.600 m una profundidad promedio de – 11.60 m, en el Canal Interior –Progresivas 200 m a 1.650 m una profundidad promedio de -9,70 m, en la Zona de Giro una profundidad promedio de -10,00 m, en la Posta de Inflamables una profundidad promedio -8.70 m, y en los Sitios 8 y 9 – Espigón Nº 2 una profundidad promedio de -9,00 m, todas referidas al 0 SHN.

Más noticias
4 de abril del 2024

Fuente: Centro de Innovación para la Logística y el Transporte de Mercancías (CITET), España.

El transporte y la logística desempeñan un papel fundamental en el desarrollo de la economía nacional, pues resultan vitales para garantizar un aprovisionamiento, distribución y exportación efectiva de los bienes y mercancía de diversos sectores. Sin embargo, a medida que su importancia crece, también aumentan los desafíos a los que deben hacer frente.

La distribución de mercancías genera importantes impactos en términos de contaminación y congestión, entre otros aspectos. El Observatorio del Transporte y la Logística en España señala al transporte por carretera como el área que más emisiones genera en ese país, con una media de 82 millones de toneladas de CO2. Superando al energético e industrial, confirman su impacto medioambiental señalando cómo el 27,5% del total de emisiones GEI españolas proceden de esta actividad.

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El aumento de conciencia sobre la huella de carbono del sector, sumado a la presencia de cada vez más ciudadanos en las áreas urbanas, acentúa la llegada de medidas como las 66% para 2050. Estas regulaciones han supuesto que actividades como la distribución de última milZonas de Bajas Emisiones. Según datos de la ONU, actualmente en torno al 54% de la población mundial reside en áreas urbanas, una cifra que se prevé que aumente hasta llegar al la se encuentren en el foco de las instituciones y ante una situación desafiante: exigencias en términos medioambientales, económicos y sociales se unen a hábitos de consumo consolidados en los bajos costes, rapidez de envío y eficiencia.

Hacer frente a esta situación, adaptándose a las necesidades tanto de ciudadanos como de instituciones, puede generar complicaciones. Pese a ello, cada vez son más las propuestas que han nacido desde los propios actores implicados en la cadena y que están siendo aplicadas con éxito, como son los puntos urbanos de reparto.

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Vehículos de energías alternativas (VEAS)

El desarrollo de esta iniciativa muestra la capacidad de satisfacer las necesidades de todos los involucrados. En este contexto, está ganando fuerza otra solución importante que aboga por la sostenibilidad: los vehículos de energías alternativas – VEAS –.

Las ya mencionadas ZBE, unidas a las restricciones de acceso a vehículos de combustibles fósiles y a las medidas específicas orientadas al reparto, conforman una de las mayores barreras en la distribución actual. Hacer frente a esta situación es una exigencia cada vez más demandada, no sólo por las entidades públicas, también por las propias empresas que buscan optimizar su actividad en las ciudades, adaptándose a las nuevas exigencias de una manera que resulte beneficiosa para su negocio.

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Desde el sector automotriz se plantean soluciones para lograr un transporte sostenible y adaptable, como es la electromovilidad o los vehículos impulsados por gas u otras energías verdes. Su incorporación puede mejorar tanto el impacto medioambiental del sector como la eficiencia de la movilidad, pues promueven la aplicación de la tecnología también a la hora de optimizar las rutas de distribución.

Los vehículos eléctricos están ganando terreno rápidamente, especialmente en entornos urbanos, debido a sus beneficios ambientales. Al no emitir gases nocivos, contribuyen significativamente a reducir la contaminación del transporte, lo que permite su acceso a zonas restringidas, mejorando la eficiencia de la distribución de mercancías en entornos urbanos. Sin embargo, su aplicación aún requiere mejoras y desarrollos, ya que actualmente son más beneficiosos para modelos más pequeños, que se utilizan principalmente en sectores como HORECA o e-commerce – áreas con una alta demanda de distribución.

Otras soluciones, como los vehículos de gas u otras energías verdes, pueden ofrecer una mayor autonomía y capacidad de carga, aspectos clave a la hora de superar las barreras a las que hace frente el sector actualmente. Estas propuestas ganan cada vez más presencia en colaboración con otras alternativas como los casilleros inteligentes o el uso compartido de recursos, entre otros.

Integración y ajuste de los VEAS

Desde CITET, clúster de innovación para la logística y el transporte de mercancías, promovemos y facilitamos la innovación tecnológica del sector, apostando por la transformación digital como herramienta para facilitar el desarrollo y progreso del ecosistema logístico y de transporte. Por este motivo, hablar de las necesidades de movilidad de la DUM nos resulta esencial. En este sentido, CITET lleva años trabajando por la integración y ajuste de los VEAS en entornos urbanos mediante la ejecución de diversos proyectos centrados en esta temática, como el desarrollo de la Guía VEAS diseñada para la Comunidad de Madrid.

Con el objetivo de recabar, identificar y aportar la información necesaria para facilitar el proceso de adquisición de vehículos de energías alternativas a empresas o autónomos de esta comunidad autónoma, la guía cuenta con información detallada en la que se explica el entorno normativo, los distintos tipos de vehículos y sus características, la oferta comercial disponible, factores de decisión, recomendaciones y muchas otras cuestiones de interés.

Además, desde CITET hemos realizado otros proyectos como el estudio “Requerimientos y características para nuevos formatos de vehículo de transporte para la distribución urbana de mercancías”, donde se han analizado las oportunidades, barreras y posibilidades que tiene el desarrollo e implementación de nuevos formatos de vehículos de transporte para la DUM. Reuniendo a los principales agentes de la logística de última milla y obteniendo una serie de conclusiones.

Por un lado, observamos la necesidad de armonización en las ordenanzas municipales. En muchas ocasiones existe una falta de concreción en términos de tipología de vehículos aptos para hacer DUM, hecho que dificulta de gran manera la distribución de mercancías, y genera problemas añadidos a los logísticos.

Las limitaciones normativas, largos tiempos de adaptación de las ciudades y las incertidumbres que surgen en torno a los sobrecostes y riesgos económicos de apostar por la sostenibilidad son algunas de las cuestiones que más influyen a las compañías en su paso por apostar por los VEAS.

Es clave la necesidad de facilitar la posibilidad de realizar inversiones en este campo, así como la esencialidad de contar con ayudas específicas para la implementación de estos nuevos formatos de vehículos, de los que aún se tiene un gran desconocimiento y, por tanto, grandes prejuicios.

Desarrollar infraestructuras público-privadas, privadas o colaborativas que impulsen esta transformación logística, promocionar de manera institucional la entrada de vehículos sostenibles y potenciar las ventajas de su uso como vehículos de distribución son algunas de las claves que pueden permitir, de manera paulatina, la aceptación y entrada de estas soluciones a cada vez más ciudades españolas.

Nota completa publicada en  Revista Énfasis   edición abril 2023.

16 de noviembre del 2023

La empresa brinda soluciones de movilidad corporativa en Argentina, a través de sus diferentes unidades de negocio como Traslada y VAK, » sigue creciendo en sus servicios y en materia tecnológica», según indicó en un comunicado de prensa.

En este sentido se detalló que la firma «Aumentó un 250% en mudanzas de oficinas y se debe a que muchas empresas deciden achicar su espacio o alejarse del microcentro, en ambos casos necesitan también el uso de depósitos para objetos no productivos y mobiliario, nicho en el que la compañía sigue avanzando.»

Respecto a los traslados del personal de grandes empresas, se indicó que el segmento continúa en crecimeinto y la demanda de charters y micros  creció en un 450% respecto al año pasado, así como también los traslados grupales para eventos corporativos que suceden para esta época del año, muy especialmente.

Uso de tecnología

Desde la firma se afirmó que el crecimiento observado está relacionado con su innovación permanente en el servicio de su app exclusiva para chárter que brinda: trackeo, seguridad y medios de pago digitales. «Esta tecnología no solo les permite a los pasajeros hacer la reserva de su asiento, ver el recorrido online, acceder a paradas estratégicas y subirse a la hora exacta, para evitar gasto de tiempo innecesario, sino que además, cuando los mismos suben al vehículo, escanean un código QR que registra su presentismo y emite reportes que les sirven a las empresas contratantes, en función de los cuales pueden ir analizando si necesitan una combi de 19 lugares o mini bus de 24 o bus de 45, y de este modo bajar costos según la necesidad real», se detalló.

En materia de sguridad , las unidades «disponen de un botón antipánico. Si los choferes o pasajeros atraviesan una situación de robo o violencia, presionan ese botón y desde la central de Grupo Traslada se puede seguir el caso con el 911″, explicaron.

Por último dentro de su unidad de negocio VAK, dedicada a la distribución y almacenamiento de cargas y fletes corporativos, con su software “Easy Depo», ofrece la posibilidad de administrar el stock e inventario no productivo, al llevar un control del mismo entre las diferentes oficinas de una compañía, sus depósitos o domicilios de los empleados, y centralizar la información en un solo lugar. «Esto evita que la empresa tenga que invertir tiempo y recursos propios para esta tarea», concluye el comunicado de prensa.

6 de noviembre del 2023

Por: Juan Pedro Cano (*)

En Argentina se desarrollan proyectos de carbono forestal desde hace más de 15 años en distintas regiones y con diferentes abordajes, en 20.000 hectáreas aproximadamente y con un potencial de mitigación de más de 1.600.000 toneladas de CO2 de los cuales ya se llevan mitigadas más de 500,000 t de carbono. A pesar de los avances a nivel internacional en acordar las reglas para los mercados de carbono, en nuestro país aún hay mucha incertidumbre para que se desarrolle un mercado que sea atractivo y confiable para el desarrollo de este tipo de proyectos.

Hoy existen proyectos en desarrollo y certificación por una superficie de más de 90.000 hectáreas por distintos miembros de la MCFN, lo cual equivale a más de cuatro veces la superficie de la Ciudad de Buenos Aires.

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 Las soluciones basadas en la naturaleza y el cambio climático

El mundo se enfrenta a un tremendo desafío: no sobrepasar los 1,5/2°C de calentamiento global durante el siglo XXI, por las graves consecuencias ambientales, sociales, económicas y climáticas que traerá aparejado este aumento de la temperatura, a menos que se logren reducir profundamente las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de forma urgente.

En este contexto, y como fruto de la implementación de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), los mercados de carbono surgen como una vía para canalizar financiamiento, principalmente privado, para la acción climática. Es un mecanismo que busca ser complementario y económicamente viable al compromiso asumido por muchos países, empresas e individuos para disminuir las emisiones de gases que contribuyen al efecto invernadero, una de las principales causas del cambio climático que está sufriendo el planeta y con los consecuentes impacto negativos sobre la salud de los seres humanos, su seguridad alimentaria, la actividad económica, el agua y otros recursos naturales.

Los mercados de carbono son sistemas en donde gobiernos, empresas e individuos pueden comprar y vender unidades (créditos), ya sea para respaldar las emisiones de GEI o bien para compensarlas. Se busca, mediante mecanismos de mercado, generar incentivos para la captación o disminución de emisiones, volviéndolo viable económicamente.

Hoy hay una gran demanda de proyectos de captura y reducción de emisiones por parte de empresas que quieren equilibrar su huella de carbono, especialmente orientada a soluciones basadas en la naturaleza (NBS por sus siglas en inglés). La oferta de este tipo de proyectos, los NBS, está muy por debajo de la demanda internacional, lo cual se presenta como una oportunidad para atraer inversión en este sector. Esta inversión implica no sólo réditos económicos para los propietarios o poseedores de las tierras sino para los trabajadores necesarios para el desarrollo y el mantenimiento de estos proyectos, además de los beneficios ambientales locales y globales ya mencionados.

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Actualmente, en el mundo hay más de 11.800 proyectos de captura y reducción de emisiones certificados y registrados bajo estándares internacionales. Sin perjuicio de que tan sólo aproximadamente el 6% de dichos proyectos son del sector de la Agricultura, Bosques y Usos del Suelo (AFOLU, por sus siglas en inglés), el potencial de crecimiento es enorme considerando que en 2021 este sector comercializó el 46% de todo el volumen de transacciones del mercado voluntario. La demanda por proyectos de captura y reducción de emisiones certificables y verificables con impacto no sólo en carbono sino en otros servicios ecosistémicos, es cada vez mayor.

Este volumen de proyectos está aumentando rápidamente a medida que hay más demanda por ellos. El valor de los mercados voluntarios globales de carbono casi se cuadruplicó en 2021 hacia USD 2 mil millones, impulsado por proyectos NBS y un aumento de los precios de mercado.

En Argentina, el 10% de las emisiones de gases de efecto invernadero provienen del cambio de uso de la tierra y la silvicultura, es decir de la pérdida y degradación de los bosques y su uso intensivo. Es por eso que los bosques son clave en este contexto: brindan importantes funciones de la naturaleza para la sociedad, contribuyen a la seguridad hídrica mediante la regulación del ciclo del agua, mitigan fenómenos extremos de inundaciones y sequías, preservan los suelos contra la erosión y purifican el aire, y son centrales para la biodiversidad y la preservación de flora y fauna. Asimismo, cumplen un destacado rol en la regulación de temperatura y en el almacenamiento de carbono.

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Por eso, los proyectos de captura o reducción de emisiones de carbono son una oportunidad para generar ingresos económicos a quien, por ejemplo, conserve, haga un uso mejorado o restaure o reforeste bosques. Ante la necesidad de conservar, recuperar nuestros bosques y ecosistemas, este mecanismo se presenta como una alternativa o complemento económico para el sector agroforestal, y de esta forma, una vía para aportar al logro de los compromisos de reducción de emisiones de los países signatarios de la CMNUCC, como lo es Argentina.

(*) Coordinador General de la Mesa de Carbono Forestal Nacional (MCFN). Especialista en gestión ambiental para países emergentes y en vías de desarrollo (TechnischeUniversitätDresden). Maestrando en Planificación y Evaluación de Políticas Públicas (Universidad Nacional de General San Martín). Consultor experto en sustentabilidad y derecho, gestión y política ambiental con casi 15 años de experiencia. Asesora de manera independiente y a través de CICLA.

Nota  completa publicada en Revista Énfasis edición noviembre 2023. Ingresá aqui.

31 de enero del 2024

En un escenario económico marcado por la inflación y la desregulación de precios en Argentina, los transportistas, especialmente aquellos pertenecientes a pequeñas y medianas empresas, se enfrentan a desafíos financieros cruciales que afectan directamente su rentabilidad. Ante esta realidad, es fundamental adoptar estrategias y prácticas para mantener la estabilidad económica en el sector del transporte de carga terrestre.

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Emiliano Vainstein, CFO de Avancargo, brinda algunos tips que las empresas de transporte, sobre todo las más pequeñas, deben tener en cuenta para desarrollar, por sí o por terceros, con el objetivo de surfear la época. Ellos son:

1. Registro detallado de ingresos y gastos

Antes que nada, realizar un registro preciso de todos los ingresos y gastos. Es fundamental, en este marco, destacar la importancia de «refinar el análisis de los costos», yendo más allá del combustible. Incluir ítems como la reposición y mantenimiento de vehículos, seguros y otros rubros permite una visión más completa de la rentabilidad.

2. Negociar plazos de cobro

Es importante establecer plazos de cobro razonables con los dadores de carga, teniendo en cuenta los costos de operación y la inflación.

3. Estar atentos a la evolución de los precios

Es importante monitorear los costos de los insumos y los servicios para poder actualizar los precios de los servicios de transporte de manera oportuna.

4. Monitoreo de indicadores económicos

Estar al tanto de los indicadores económicos relevantes, como los índices de FADEEAC y CATAC, para comprender las tendencias y ajustar estrategias financieras en consecuencia.

5. Gestión eficiente de pagos y cobros

Priorizar la puntualidad en los pagos por parte de los dadores de carga es esencial para garantizar la rentabilidad, ya que en la dinámica inflacionaria actual el habitual desfase entre los índices mediante los cuales las empresas actualizan el valor de sus servicios y el aumento de costos se agrava si la facturación se demora. Es importante implementar sistemas y equipos especializados en cuentas a pagar y cuentas a cobrar para facilitar el proceso financiero.

6. Conocimiento y adaptación a la dinámica de pagos de clientes

Es importante reconocer las diferencias en la gestión de plazos entre clientes grandes y Pymes. Los grandes dadores de carga, aunque más lentos en sus procesos, son más previsibles y regulares en el tiempo de los pagos. Las Pymes, en tanto, aunque más cercanas y a veces más ágiles para tratar, suelen ser informales y con sus tiempos de pago, más expuestos, además, a los vaivenes de flujo de fondos.

7. Uso de tecnología y digitalización

Adoptar soluciones tecnológicas que simplifiquen la tramitación documental y agilicen los procesos operativos. La digitalización puede facilitar la relación con grandes clientes al reducir los obstáculos burocráticos.

8. Adelantos financieros y alianzas Estratégicas

Considerar opciones de financiamiento como adelanto de combustible es una herramienta clave, especialmente para Pymes y cuentapropistas.

9. Planeamiento financiera a corto, mediano y largo plazo

Desarrollar planes financieros que aborden los desafíos actuales y futuros, considerando la posibilidad de expansión en un entorno de financiamiento reducido. La planificación a largo plazo es clave para adaptarse a las condiciones cambiantes del mercado.

10. Alianzas para acceso a financiamiento

Buscar alianzas estratégicas que faciliten el acceso a financiamiento. Colaborar con empresas que puedan proporcionar apoyo financiero de manera estratégica para mejorar los plazos de cobro y garantizar una operación financiera sólida.

«La adaptación a las condiciones económicas actuales en Argentina requiere de una gestión financiera ágil, estratégica y orientada a mantener la rentabilidad de los transportistas. La combinación de tecnología, políticas internas eficientes, y alianzas estratégicas puede ser clave para superar los desafíos actuales», concluye el referente. 

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11 de octubre del 2023

Por: Raúl Vaca Viviani (*)

Como lo adelante al inicio, se dio a conocer que diferentes actores del sector están avanzando en la recuperación de la relación bilateral entre Argentina y Brasil. Pero… ¿Cuál es el devenir que tiene esa reconstrucción? Se conoce que la flota de la Marina Mercante en Argentina, actualmente se reduce a un número cercano de 40 buques, de los cuales aproximadamente el 70% de ellos son buques tanque. Estos buques se encuentran dedicados al cabotaje nacional y muchos de ellos trabajan para empresas del Estado, como CAMMESA e Y.P.F, por lo que el mantenimiento de esas fuentes de trabajo se encuentra íntimamente ligado al resultado eleccionario del mes de octubre.

Es en este marco, no es difícil analizar que las plazas de buques ocupados en el cabotaje nacional, son finitas. Y que resulta de suma urgencia plantear proyectos que apunten a que Argentina sea parte de un tráfico marítimo regional.

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Sobre este punto, es que los invito a detenernos porque existe un trabajo que se basa en un proyecto de Ley que sería complementario a la norma ya existente 27.419 y el Régimen de Promoción para el Desarrollo del Tráfico Internacional Fluvial y Marítimo que se encuentra plasmado en ese proyecto, y aquí aparece la creación del Registro Internacional de Buques Argentinos (RIBA). También, según pude conocer se impulsa en el ámbito del MERCOSUR, la firma de lo que sería un Acuerdo Multilateral de Transporte Marítimo o, de no ser posible debido a la posición manifesta contraria del Uruguay, se trabajaría en una reedición de un Acuerdo Bilateral con la República Federativa del Brasil.

Ahora bien, ¿qué sé hace para alcanzar ese objetivo? y una respuesta a la consiga sería el anteriormente nombrado proyecto entre los Sindicatos Marítimos y Fluviales en conjunto con la Federación de Empresas Navieras Argentinas (FENA), que contempla la creación del RIBA, en el cual se establece una serie de beneficios fiscales para las armadoras que se encuentren inscriptas en ese registro. Y según pude conocer mediante diálogo con fuente especializadas del sector, este marco permitiría reducir un 75%, las contribuciones al Régimen Nacional de la Seguridad Social. ”Este procedimiento se implementaría calculando sobre los salarios del personal argentino, enrolados en los buques inscriptos en el RIBA, aplicando igual criterio respecto de las contribuciones al Régimen Nacional de la Seguridad Social a calcularse sobre los Francos Compensatorios devengados por esos embarques; los fletes generados por buques inscriptos en este registro con origen en puertos argentinos y destinos internacionales”, indicó mi fuente especializada al respecto a la vez que detalló que se planea que este tipo de tarea sea considerada exportación de servicios con los consecuentes beneficios. También aparecería aquí la creación del Impuesto al Tonelaje, “que establecería un pago diario en divisa por cada 100 toneladas de registro neto de los buques inscriptos”, detallan fuentes del sector.

Pero la proyección e implementación debe también abarcar a los tripulantes exclusivamente argentinos mediante beneficios impositivos. Se debería colocar rol en una posición mucho más competitiva, a nivel internacional.

Este proyecto que detallo, fue entregado a las autoridades a finales del mes de mayo del año pasado, acompañado de una nota firmada por los representantes de los sindicatos del sector y Marítimo – Fluvial y de la FENA. “Tenemos la palabra empeñada por parte de sectores de gobierno que este proyecto será presentado para su tratamiento parlamentario antes de finalizar el año en curso”, indican voces interesadas en avanzar.

En este marco,  en diversas reuniones mantenidas entre sindicatos y empresas, incluso celebradas en Montevideo a principios de noviembre del 2022. Los diferentes actores que representan a los trabajadores del sector agrupados hoy en la Federación Sindical, Marítima y Fluvial (Fe.Si.Ma.F.), plantearon su postura, que fue acompañada por los representantes del Gobierno Nacional, y que quedó plasmada en una propuesta de Acuerdo Multilateral de Transporte Marítimo, en el acta labrada al finalizar la reunión del SGTN°5. Documento que indica que se considera de fundamental importancia “el poder lograr la firma de dicho acuerdo ya que con ello se lograría potenciar las flotas de los países miembros, generar fuentes de trabajo genuinas y conformar un bloque sólido ante el potencial avance de la Unión Europea en el MERCOSUR”, dice el documento que lleva las firma de los referentes.

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También, en los últimos meses se conoció que la Fe.Si.Ma.F mantuvo diálogo con Sindicatos y Cámaras empresarias del Brasil, con el fin de encarar en forma conjunta el impulso hacia un Acuerdo Multilateral. En tanto, cabe mencionar que Uruguay, al respecto mantiene una postura compleja, ya que es notorio que el país vecino evita desde hace años el tratamiento de un Acuerdo Multilateral.

Un fino trabajo mancomunado con Brasil

Es aquí que ante este panorama con Uruguay y viendo una posible alianza con Brasil para lograr el tan anhelado Acuerdo, es que usando una lógica válida, los referentes sindicales han avanzado en su relacionamiento con Brasil, mediante reunión con el Presidente de la CONTTMAF (Confederação Nacional dos Trabalhadores em Transportes Aquaviários e Aéreos) del Brasil, Capitán Carlos Muller, “a fin de coordinar un encuentro en el que participen los Sindicatos y el sector empresario de la Argentina y Brasil en forma conjunta, con el objeto de emitir un documento para elevar a las  Autoridades de ambos países que contenga los lineamientos del Acta de Montevideo para la suscripción de un Acuerdo”, explican al respecto referentes sindicales y  tengo confirmación que en un encuentro realizado en Río de Janeiro, con las partes citadas a la que se sumó una representante de ANTAQ (Agência Nacional de Transportes Aquaviários), la entidad manifestó su postura alineada del gobierno de Brasil, sobre las cláusulas planteadas que debe contener el Acuerdo.

El resultado de esa reunión fue la “Declaración de Río” en donde las organizaciones representativas de la gente de mar y Armadores de Argentina y Brasil decidieron recomendar a ambos Gobiernos las medidas necesarias a fin de encontrar las soluciones a los problemas que se viven actualmente en el sector, así como estimular el crecimiento regional del transporte marítimo en el MERCOSUR; todo ello en pos de asegurar la eficiencia y regularidad del transporte marítimo ante el escenario geopolítico de inestabilidad. Y es que, es de suma urgencia para que el sector marítimo sobreviva, alcanzar tarifas de flete adecuadas y existe una honda preocupación por el impacto en la actividad económica y el mantenimiento de empleos locales en ambos países.

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El documento presentado a los dos gobiernos estimula la idea de la posibilidad de volver a contar con un Acuerdo Bilateral el que se le ofrecería para su incorporación al resto de los países de la región.

“El proyecto ya está casi concluido, solo falta por parte del sector armatorial ponerse de acuerdo en un par de puntos. Esto implicó un significativo avance en las relaciones de los dos países, luego de que la administración de Bolsonaro diera por finalizado el Acuerdo Bilateral (el 05 de febrero de 2022), pese a que los sectores sindicales y empresariales de ambos países se opusieron a esa barbaridad”, analizan al respecto en off en el sector marítimo fluvial argentino.

El inicio de una nueva relación Argentina – Brasil

Ahora bien, analizando los acontecimientos anteriormente detallados sobre el panorama de relacionamiento de todos los actores interesados en lograr una actualización en la manera de trabajar del sector, es que podemos decir que la situación actual es muy buena y altamente favorable para lograr finalmente la reglamentación de un Acuerdo. Argentina tiene como principal socio comercial a Brasil, seguido de China y los EEUU. Para Brasil somos el tercer socio comercial en importancia luego de China y USA. Evidentemente nuestros comercios en lo que hace a los principales compradores son los mismos.

Con este tipo de Acuerdo, además de reservar el comercio regional para nuestros buques, se abre una puerta para exportar productos a los mismos países compradores. Luego de la caída del Acuerdo Bilateral (iniciado en marzo del 2021) el tráfico de contenedores cayó de 341.000 Teus en 2021 contra 101.000 Teus en 2022, según estadísticas de la Agencia Nacional de Transportes Aquaviários (ANTAQ) dependiente del Ministerio de Puertos y Aeropuertos de la República Federativa del Brasil. Esto marca a las claras la necesidad que tiene para ambos países el sostenimiento de un Acuerdo de Transporte.

La importancia de la firma de un Acuerdo de Transporte Marítimo entre las dos naciones, nos permitirá la posibilidad de establecer políticas de largo plazo para ambos países garantizando una economía de escala. El mismo traerá aparejado el mantenimiento del “Know How” y entrenamiento de las tripulaciones, el sostenimiento de una “capacidad de carga estratégica” para continuar con la prestación de servicios básicos durante situaciones de crisis, como por ejemplo durante la Pandemia de Covid-19 y  fundamentalmente, la conservación de las divisas al transportar con flota propia, evitando así la importación de servicios, entre otros beneficios.

El arribar a un acuerdo entre ambos países, conservando para cada Estado el tráfico de cabotaje nacional, ayudará en un futuro no muy lejano, a que actuemos como un bloque ante el avance de la Comunidad Europea en el tráfico Regional, impulsará el crecimiento de ambas Marinas Mercantes Nacionales y nos dará soberanía regional en el transporte.

(*) Periodista especializado en comercio exterior. Editor Comexonline.

Nota  completa publicada en Revista Énfasis edición octubre 2023. Ingresá aqui.

 

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